El proyecto de la Illa Corsini supondrá una inversión de 3 millones de euros

La administración local está trabajando en el proyecto, que va a hacerse extensivo a las calles Unió y Apodaca

02 noviembre 2018 11:37 | Actualizado a 09 noviembre 2018 12:46
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

En diciembre del año pasado el equipo de gobierno daba luz verde a la creación de una comisión para tirar adelante el proyecto de la Illa Corsini. La iniciativa ha servido para sentar las bases de una actuación que debe ser una de las principales inversiones que aparezcan en los presupuestos de cara al año que viene. 

El proyecto aún no está redactado. La filosofía es la que defendía el exlíder del PDeCAT Albert Abelló, que incluyó esta actuación como una de las medidas estrella en su programa electoral para los comicios de 2015. No obstante, a lo largo de estas reuniones de trabajo se han incluido algunas ideas que difieren ligeramente respecto a la propuesta inicial.

«Por voluntad expresa del alcalde, la Illa Corsini comprenderá también la reforma de las calles Unió y Apodaca», explicaba esta semana el concejal de Territori del Ayuntamiento de Tarragona, Josep Maria Milà. Josep Fèlix Ballesteros quiere aprovechar el proyecto para incluir también la rehabilitación de un eje que había sido una de las principales arterias comerciales de la ciudad y que ahora mismo se encuentra en un avanzado estado de degradación.

Milà avanza que el proyecto de remodelación de este eje consistirá principalmente en ensanchar los arcenes para facilitar la circulación de los peatones. Encima de la mesa hay dos alternativas. Una pasa por dejar de dos a un carril la circulación, que en el caso de la calle Unió es unidireccional. La otra posibilidad es eliminar la zona de aparcamiento para que los viandantes ganen espacio. Son aspectos que deben seguir trabajándose con los responsables de movilidad de la corporación municipal, además de los vecinos y las asociaciones de comerciantes.

Más allá de esta actuación, el Ayuntamiento prevé cambios en la iluminación y sustituir el mobiliario urbano, que incluirá parterres florales, ahora mismo inexistentes. «Es la única calle de la isla que falta por urbanizar adecuadamente y va a hacerse extensivo desde la Rambla Nova a la Plaça del Carros. Lo otro prácticamente está todo hecho, tan solo falta articularlo», explica el edil socialista.

La remodelación de este eje formará parte de la primera fase de actuaciones en las que progresivamente irá haciendo extensivo este proyecto. Con todo, la administración local calcula que la inversión total alcanzará los tres millones de euros.

Integrar el Fòrum de la Colònia

La Illa Corsini se basa en la peatonalización total o parcial de las calles que rodean el Mercat Central, como las calles Reding, Cardenal Cervantes, Lleida, Cobos, Canyelles, Governador González, Fortuny, Soler y Cristòfol Colom. De esta manera, se podrá disfrutar de una plataforma única eliminando las actuales barreras arquitectónicas. 

En esta zona tan céntrica hay carencia de equipamientos y la peatonalización podría crear espacios de uso comunitario, como parques infantiles y la instalación de mobiliario urbano, como fuentes, bancos y más vegetación. Precisamente en este sentido pivota la segunda línea de intervención. Ésta consistirá en integrar la remodelación del Fòrum de la Colònia. A pesar de que ésta es una intervención que afecta al Àrea de Patrimoni y a la Generalitat, el responsable en materia de urbanismo considera que este equipamiento romano debe «integrarse como espacio público de ocio». 

El tercer eje de actuación será la peatonalización total o parcial de esta parte de la ciudad. Esto comportará cambios sustanciales. Implica que si la calle Canyelles será peatonal, el acceso al párking de la Plaça Corsini tendrá que hacerse por la Rambla. Un segundo eje que será exclusivamente para los peatones es la calle Lleida, por lo que tendrá que cambiarse también la salida del aparcamiento. 

El concejal de Urbanisme explica que se priorizará la peatonalización. Sin embargo, deberá garantizarse el acceso para las personas que tengan aparcamientos o las furgonetas de carga y descarga que se mueven por esta zona comercial y el Mercat Central. «Lo más fácil acabará siendo poner un sistema de pilones inteligentes, facilitando el acceso a los vehículos de emergencias y para que puedan pasar las personas autorizadas», describe Milà. 

Su progresiva implantación es uno de los aspectos que deberá definir la comisión técnica que está trabajando en el proyecto. No obstante, el edil responsable en materia de urbanismo calcula que la ejecución puede alargarse por espacio de «unos dos años».

Comentarios
Multimedia Diari