«Si tiene una cocina, tiene un laboratorio en potencia». Este es el lema con que un equipo de investigadores de la Universidad Rovira i Virgili (URV) y el Institut Català d’Investigació (ICIQ) quieren acercar la experimentación a las familias con niños y adolescentes.
Lo hacen en el marco del programa Repte Experimenta, dirigido a escuelas e institutos de secundaria, y que han adaptado a la situación en que nos encontramos.
Inicialmente el programa consiste en que los alumnos, de la mano de ‘padrinos’ científicos vinculados al mundo académico y empresarial, diseñen un experimento con productos de uso cotidiano (alimentos, productos de farmacia o de limpieza ...) y realicen un vídeo para entrar en concurso y así premiar a los mejores jóvenes divulgadores científicos.
Como el estado de alarma impide que los padrinos trabajen en el aula con los alumnos, los investigadores han decidió apadrinar a niños, niñas y jóvenes de forma virtual. Desde ayer y mientras dure el confinamiento, se publicarán en la web del programa (repteexperimenta.cat) y en las redes sociales propuestas de experimentos sencillos que las familias pueden hacer en casa. Así, los investigadores del URV y el ICIQ y sus hijos e hijas se ponen la bata y los guantes para invitar a todos a descubrir el método científico de primera mano. Entre los experimentos que ya están disponibles hay desde los que pueden hacerse con agua y huevos, hasta otro que enseña cómo fabricar nieve artificial con pañales.
Para apuntarse al reto
Quién lo pruebe y comparta un vídeo del experimento hecho vía Instagram o Facebook con la etiqueta #RepteExperimentaCasa, entra en un sorteo para ganar cinco entradas a Port Aventura, un juego de edición especial de aniversario Quimicefa con 100 experimentos o dos libros de la colección Experimenta! de Cossetània con una veintena de ideas para hacer experimentos con los niños.
El programa cuenta con el apoyo de las empresas: Elix Polymers, Dupont Water Solutions, BASF, Messer y la Unitat de radioquímica ambiental i sanitària.