La Mata Hari mediterránea

Hijo de un oficial de la aviación italiana, la banda sonora de la infancia de Attilio Micheluzzi (Istria, Italia, 1930) fueron los motores de aeronaves y las grandes gestas  del aire, con nombres como el Barón Rojo o Mermoz. Pero a diferencia de su padre, Attilio cambió el aire por la tierra: se graduó en arquitectura y se trasladó a África para trabajar. A principios de los 70 decidió volver a Italia y encontró hueco como colaborador en la revista Corriere dei Piccoli, donde dibujaba bajo la firma de Igor Arzbajeff. 

Años después, cuando Attilio ya empezaba a ser reconocido gracias a las aventuras de Johnny Focus, el rubio reportero, recibió un encargo gráfico para Il Gironalino, una famosísima revista de cómics italiana. En la época se estilaba un personaje marcadamente masculino, libre, inteligente, valiente e independiente, osado a la par que despistado conquistador, que se enfrentase a mil y una aventuras, principalmente en destinos lejanos y exóticos,... pero Micheluzzi, siguiendo la idea del redactor jefe del Corriere dei ragazzi Alfredo Barberis, decidió dibujar una protagonista femenina. 

Y así nació Petra, una mujer que a sus 23 años es la heroína perfecta: joven, culta, intrépida, autosuficiente, resuelta, bella y elegante, interesante, rica,... y con unas fuertes creencias morales y políticas, del deber y la justicia. 

Hija del polaco Jan Karlowitz, heredó de él el amor por la aviación (un guiño a Micheluzzi padre) siendo en la actualidad  una excelente piloto, también su estilo y su vida independiente y el interés por viajar. Además de parte de su profesión: ambos son personas de negocios, gestionan con bancos y hacen transacciones comerciales en Extremo Oriente, lo que le permite llevar ese tren de vida despreocupado. A su madre, la distinguida francesa Eliane, le debe su pasión por la música y arte, además de saber más de siete idiomas. 

A través de la estilosa polaca, desmarcándose del feminismo y del estilo de héroe de cómic de la época, Micheluzzi quiso relatarnos la Gran Guerra. Con una Petra Karlowitz en blanco y negro, con su fiel amigo Nung y su can Saphiro, viviréis aventuras de guante blanco, viajando por la vieja Europa en los años 1917-1918, con detalles muy específicos sobre las aeronaves, viendo cómo la aristocracia europea se tambalea y con el matiz diferencial de contar con las interpelaciones puntuales del autor, Attilio Micheluzzi.

Petra Chérie

• Autor:  Attilio Micheluzzi
• Editorial:  Ponent Mon
• Páginas:  340