Malaka, la Málaga más turbia

La nueva producción de TVE es un thriller policial oscuro, denso y complejo donde los protagonistas brillan notablemente

13 septiembre 2019 17:17 | Actualizado a 16 septiembre 2019 17:42
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Comienza Malaka y durante los primeros cinco minutos no hay ni una línea de diálogo. Las escenas se van sucediendo de manera pausada y con una calma y detalle que nos muestran claramente, ya desde el principio, por los derroteros por los que se va a mover esta serie.

Malaka es la nueva propuesta de TVE para esta temporada que acaba de comenzar. Es un thriller policiaco protagonizado por Maggie Civantos, Salva Reina y Vicente Romero.

Civantos encarna a Blanca Gámez, una policía malagueña que regresa a su ciudad natal tras un grave incidente ocurrido en Madrid. Blanca es hija del antiguo capitán, toda una institución en el cuerpo, y ser ‘la hija de’ es algo que ella no lleva del todo bien. Es una mujer triste y con algunos problemas de autoestima que la hacen ser una persona de trato áspero y difícil pero que intenta desarrollar su trabajo bajo el más estricto respeto a la ley.

Por otro lado tenemos a Salva Reina, que interpreta el papel de Darío Arjona ‘Gato’. Darío es la antítesis de Blanca. Regresa a la actividad policial tras pasar un periodo suspendido por irregularidades en sus labores policiales. Se mueve en los bajos fondos malagueños como pez en el agua y no sucede nada por esos rumbos sin que él lo sepa.

El nuevo capitán ordena a Blanca y Darío que trabajen ambos en un nuevo e importante caso, aunque ninguno de los dos está muy por la labor. No quieren hacerlo, son espíritus libres que trabajan mejor solos. Pero no les queda más remedio que obedecer órdenes y trabajar juntos.

Maggie Civantos y Salva Reina se mueven por el suburbio malagueño como pez en el agua

El caso
Al comienzo del primer capítulo vemos cómo es rescatado del agua el cadáver de una mujer, a la vez que se denuncia la desaparición de Noelia Castañeda, la hija de Germán Castañeda, un importante empresario malagueño. Este será el caso que Blanca y Darío van a tener que llevar juntos.

A su vez el detective Joaquín ‘Quino’ Romero, interpretado por Vicente Romero, es contratado por una mujer para investigar la desaparición de su hijo Álvaro (Emilio Palacios). Ambos casos parecen no tener conexión ninguna.

Malaka va a ser una producción de difícil digestión si no partimos de la premisa de que pretende salirse un poco, o un bastante, de los cánones establecidos en la ficción española. El modo de presentar diversas situaciones a lo largo del primer episodio nos puede llevar al desconcierto. Aparentemente son momentos inconexos entre sí que no tienen ninguna relación, pero más adelante los vamos a ir entendiendo. De manera que hay que tener paciencia para ir desentrañando la trama.

Claro ejemplo de que los creadores de la serie entienden que el espectador va a necesitar algo de ayuda para entrar de lleno en ella, es que TVE ha decidido emitir los dos primeros capítulos del tirón, lo que considero que es un acierto, ya que durante casi todo el primer episodio se dedican a presentarnos los diversos personajes, sin ahondar demasiado en la evolución de la trama. Y ya en el segundo entran de lleno en el meollo de la cuestión. Otra cosa es que al programarlos a la vez y ser de duración algo extensa terminara su emisión de madrugada.

El vicio de este país de poner el prime time tan tarde es algo que hay que cambiar ya, sí o sí. Pero bueno, siempre nos quedará la web para verla a lo hora que nos convenga.

De Málaga a Malaka
Y todo esto se desarrolla en una Málaga poco vista, una ciudad que rara vez nos muestran en las series. La Málaga de los suburbios, de los barrios marginales, los barrios pobres, donde el trapicheo y el buscarse la vida como sea, es lo habitual. Donde la persona que mueve los hilos de la droga y la delincuencia es la reina. Donde las familias de delincuentes se disputan la supremacía del lugar. Y es así como Málaga pasa a ser Malaka.

Tal vez sea esta la seña de identidad más importante de la serie. Mostrarnos que no todo es sol y playa y que la vida en ciudades como ésta es mucho más dura de lo que aparenta.
Malaka es una serie arriesgada, que se sale bastante de lo habitual para una televisión generalista y además pública. TVE ha sido valiente a la hora de poner en imágenes su propuesta, intentando ofrecer algo totalmente distinto a lo visto hasta ahora. Pero tendrán que mostrar más en los siguientes capítulos ya que el primero me ha parecido algo flojo. De un capítulo piloto siempre se espera más. Ya en el segundo la cosa avanza y termina yendo por caminos algo más ortodoxos y seguros, derivando en un thriller policial al uso, donde Maggie Civantos y Salva Reina demuestran que son de lo mejorcito que tenemos ahora en el panorama nacional.
Malaka promete. Espero que cumpla su promesa.

Comentarios
Multimedia Diari