Primeros divorcios por el 'procés' en Tarragona

La situación política en Catalunya se ha cobrado las primeras rupturas de pareja. El procés es ya un motivo de divorcio en algunos matrimonios de Tarragona, acaso como detonante. 

En el último año, al menos dos matrimonios se han roto por esta causa. «El motivo de un divorcio no tiene relevancia a nivel jurídico. La separación se concede siempre, no hace falta argumentar ni justificar ninguna razón, pero cuando te viene a ver alguien para ello te lo comenta y es algo que trasciende», comenta un abogado de Tarragona, que matiza: «Evidentemente, cuando algo así pasa quiere decir que la pareja en sí no era demasiado sólida, pero la situación política sí puede influir como un factor más, como algo que colma el vaso», añade un letrado.

Se trata de la evolución extrema de lo que muchos sectores han denunciado en los últimos tiempos: la crispación creciente, incluso en el entorno familiar, a raíz de los últimos acontecimientos políticos, desde la celebración del referéndum del 1-O, la DUI, el 155 o el encarcelamiento de los políticos.

«Viene la familia de fuera, sale el tema en una comida, se genera una discusión... Eso, en algunos casos, puede haber generado una separación», comenta un abogado. Hace un año, en plena escalada de tensión en torno al procés, algunos entornos eran testigos de enfrentamientos o de discusiones más o menos enconadas.

«He tenido que mediar alguna vez cuando la discusión se ha desmadrado», decía el propietario de un bar en Tarragona. En algunas farmacias se llegó a escuchar el comentario de que ahora se vendían más ansiolíticos y remedios para dormir y, atención, menos preservativos, como si las turbulencias sociales y políticas nos hicieran dormir peor y tener menos sexo.

«Cuando nos centramos en un ámbito, el resto de los que forman nuestra vida quedan cojos. La compleja situación puede afectar a la libido, como perjudica a las relaciones con las otras personas», definía Jaume Descarrega, el presidente del Col·legi de Psicologia de Tarragona. 

Descarrega confirma que el procés, en los momentos álgidos, se ha colado en las consultas: «Quizás no sea el motivo principal de la visita pero sí que acaba apareciendo. Hay inquietud». Sigue Descarrega: «Lo que sucede crea sentimientos que pueden ir de la tristeza a la rabia o al odio, pasando por la frustración o el miedo, también desde un punto de vista socioeconómico. ¿Cómo me afectarán los cambios que pueda haber?».

Los psicólogos hablan de malestar emocional. «Todos sabemos que lo que está pasando genera problemas de relaciones familiares, amistosas o laborales. Existe temor a expresar según qué opiniones y, en un momento donde parece que todos estemos llamados a tomar partido, eso genera angustia». 

Existen, sin embargo, algunos casos que se producen siguiendo la lógica contraria: enlaces matrimoniales entre personas de ideologías contrapuestas. Es el caso de Alexis y Maribel. Estos dos jóvenes se casaron el pasado 15 de septiembre en el municipio barcelonés de Centelles (Osona). Lo que más llama la atención de la boda es la fotografía que se hicieron con una estelada y una bandera española y que corrió por las redes sociales. Ella, catalana, fue a votar en el referéndum del l 1 de octubre acompañada de su suegra y Alexis, natural de Las Palmas, se quedó en casa. Cuando menos, el chico asegura que «siempre he pensado que se equivocaron enviando los antidisturbios el 1-O».