Ricomà, sin apoyos para crear los Consells de Districte en TGN

El gobierno municipal reactivará en septiembre la comisión política para negociar el nuevo reglamento. PSC, Junts y CUP se muestran distantes con la propuesta de reordenación 

31 agosto 2020 05:45 | Actualizado a 31 agosto 2020 12:08
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La propuesta estrella del alcalde Pau Ricomà (ERC) en las pasadas elecciones municipales se tambalea. A día de hoy –casi 15 meses después de ser investido con los apoyos de Comuns, Junts y CUP– el líder republicano solo cuenta con los nueve votos del gobierno local –ERC y ECP–, pero no tiene garantizado aún el OK de postconvergentes y cupaires, así como del resto de formaciones de la oposición (PSC, Ciutadans y PP) para poder tirar hacia adelante el proyecto para dividir la ciudad en cinco distritos: Ponent, Llevant, Eixample, Centre y Nord.  

Inicialmente, la voluntad del ejecutivo de la Plaça de la Font era la de poner en marcha la nueva ordenación a partir del próximo mes de octubre. Sin embargo, la paralización a raíz de la crisis sanitaria del coronavirus ha frenado su tramitación. De hecho, a principios de año se llevó a cabo la primera reunión de la comisión para definir el reglamento, pero los encuentros entre las formaciones políticas no se han repetido desde entonces, ni de forma presencial ni telemática, por lo que lleva meses sin mover ficha. 

«En septiembre reactivaremos la comisión para consensuar el reglamento y poderlo llevar a la aprobación del pleno municipal antes de final de año», indica la concejal responsable del proyecto, Paula Varas (ERC), quien resalta que, entre las principales materias que se descentralizarán en los Consells, están los presupuestos participativos. «Es aquí donde está pensado que se manejen las propuestas. Para este año tenemos 200.000 euros que, si no se pueden ejecutar, los pasaremos a 2021», asegura la concejal. 

En el informe que el ejecutivo entregó en febrero a los vecinos se afirma que la función de los Consells será la de «hacer de canal de comunicación entre el Ayuntamiento y la ciudadanía» y «realizar propuestas de mejora», pero que, asimismo, «no se prevé que funcionen como órganos de gestión de asuntos particulares», ya que este servicio se seguirá ofreciendo desde la OMAC.

Necesita mayoría simple
El problema actual radica en el hecho de que, en más de un año, el equipo de gobierno no ha logrado tejer alianzas para asegurar la mayoría, como mínimo a corto plazo, en el Saló de Plens. Según el Reglament Orgànic Municipal (ROM), la aprobación de las normas de este nuevo organismo de participación ciudadana requiere contar con más síes que noes, por lo que los nueve ediles del gobierno necesitan acordar el texto con alguna otra formación. Y, de momento, el resto de partidos parece que no están por la labor, por lo que el proyecto corre el riesgo de quedar paralizado. 

«Pueden ser una herramienta muy útil, pero debemos asegurarnos de que ofrezcan soluciones reales, ya que no nos podemos permitir un sobrecoste con un nuevo organismo que no funcione», indica la concejal de Junts Cristina Guzman, quien indica que los Consells «deben estar ligados al fomento y el impulso de las Taules d’Entitats que hace muchos años que reclaman los barrios de la ciudad». 
En caso de contar con el OK de Junts, el ejecutivo de Ricomà aún no tendría garantizados los votos. Con los tres neoconvergentes Ricomà sumaría doce apoyos y, en caso de recibir el rechazo de PSC, Cs y PP, aún necesitaría a la CUP, una formación que ahora enfría su apoyo al proyecto.

«No estamos de acuerdo con la propuesta porque seguimos pensando que es burocrática y jerárquica. Ni se adecua a las necesidades ni a las características de la ciudad, ni permite una participación directa de la población», afirma la portavoz Laia Estrada, quien resalta que «lo más triste es que llevan quince meses gobernando y todavía no han sido capaces de desarrollarlos». Sobre ello, Varas asegura que en la nueva propuesta de reglamento que presentará a los partidos en quince días «se han incorporado las peticiones de Junts y CUP». 

Desde el PSC, Sandra Ramos se muestra escéptica. «Nos reunimos en breve a petición del gobierno. Veremos qué ha cambiado desde enero o febrero, cuando se reunió por primera y única vez la comisión informativa». Se da la circunstancia de que está previsto que el PSC presida dos de los cinco Consells, al ser la formación más votada en el Nord y en el de Ponent.  

Desde Ciutadans, Rubén Viñuales se muestra crítico, e indica que «no hemos tenido ninguna nueva reunión, pero tal y como está planteado, con tantas personas, resultará estéril e inútil», mientras que José Luis Martín (PP) recuerda que «se trata de otro proyecto de Ricomà sin resultados tangibles hasta el momento». 

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