Risoterapia para plantar cara al estrés y la rutina

Talleres. En la provincia, se organizan sesiones donde se enseña el arte de reír para que las emociones positivas dominen los días

02 septiembre 2019 07:30 | Actualizado a 02 septiembre 2019 10:57
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La risa puede ser una gran aliada. Una alternativa para evitar el estrés del día a día y una ayuda en el camino de búsqueda de la felicidad. En la provincia, existen centros especializados que han descubierto en la risa «la mejor medicina natural, y que no tiene contraindicaciones». «La risoterapia refuerza la seguridad en uno mismo y la autoestima, y nos enseña a vivir de una forma positiva, para sentirnos bien con nosotros mismos y con los demás», explica Anabel Pérez, risoterapeuta y psicóloga del centro Riudegust (www.risoterapiariudegust.es) en Tarragona. Desde grupos de familiares y amigos hasta organizaciones empresariales con el propósito de reforzar los vínculos entre los empleados, pasando por asociaciones sociales o culturales, pueden beneficiarse de la risoterapia.

En los talleres, los ejercicios y las dinámicas van in crescendo. No hay un número máximo de participantes (mínimo 7-8 personas). Pueden ser grupos homogéneos, y también pueden participar personas de edades muy diferentes. La duración es de 2 horas aproximadamente, pero varía en función de las necesidades del grupo y los objetivos que se quieran conseguir. «Primero se trabaja la cohesión grupal. Para ello, se utilizan técnicas y dinámicas como el juego, el baile, la música o la teatralización para perder la vergüenza. Esta emoción inicial, que puede ser neutra o negativa, se transforma en positiva, de manera que los participantes se liberan. Se olvidan de todo en ese momento», explica Anabel Pérez.

Cuerpo y mente sanos

Las ventajas para la salud física y mental son muchas. La psicóloga y psicoterapeuta Olivia Sacristán de Reus (www.oliviasacristan.com) explica que «físicamente se ponen en marcha muchísimos músculos, pensemos en el dolor de abdominales o en la cara cuando nos reímos mucho. Además, se reduce el estrés y la tensión sanguínea, mejora el funcionamiento de los órganos internos, y mejora también el funcionamiento del sistema inmune».

En cuanto a la mente, «cuando reímos segregamos muchos neurotransmisores que producen sensaciones agradables: endorfinas, dopamina, etc. (semejantes a las que se segregan cuando estamos enamorados), y ayuda a tener una visión más positiva de la vida, a sentir que existen interpretaciones más adaptativas de los problemas a los que nos tenemos que enfrentar, mejora la sintomatología depresiva y ansiosa, así como la capacidad de disfrute de la vida».

Ambas guardan relación, pero reír y sonreír no es lo mismo. Anabel Pérez explica que «sonreír es la expresión de dentro hacia fuera, inspira confianza y empatía; mientras que reír es mucho más profundo». La risoterapeuta destaca que la risa se puede entrenar. Y para ello es necesario que haya un detonante que la provoque. «Ponerse frente al espejo y empezar a reír pronunciando las vocales es una actividad diaria muy útil. Al final, te contagias tu propia risa fingida y terminas generando una sonrisa o risa suficiente para despertar emociones positivas», explica la risoterapeuta.

Para alejarnos de los sentimientos negativos también se puede echar mano del sentido del humor aunque, según Anabel Pérez, «nos falta capacidad para relativizar y desmontar las normas rígidas que tenemos». «Disfrutar de las bromas, -dice la experta-, o reírse de uno mismo nos ayudará a aceptar a los demás, a apreciar el lado bueno de las cosas, además de mejorar nuestra salud».

Con la risoterapia estamos un paso más cerca de la felicidad.

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