Tarragona: Solidaridad en forma de cooperativas de alumnos

Se multiplican en la provincia. Van más allá de los equipos de trabajo entre compañeros de clase. Aparte de conocimientos técnicos de economía, el objetivo es aprender valores 

20 junio 2019 07:20 | Actualizado a 20 junio 2019 10:39
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

«Es un grupo igualitario de alumnos donde todos expresan sus ideas para un fin no lucrativo y para ayudar a la escuela». Así define Daniela Olivares la cooperativa de alumnos, una especie de  grupo de trabajo de compañeros de clase pero que va mucho más allá porque el grupo no solo se organiza con presidente/a, secretario/a y tesorero/a, sino que destila una serie de valores.

Tarragona es la demarcación catalana en la que más han crecido las cooperativas de alumnos este curso y la segunda que más tiene después de Barcelona. Camp de Tarragona y Terres de l’Ebre cuentan con doce cooperativas frente a las dos del curso pasado. Girona ha pasado de dos a cuatro. Lleida de dos a tres. En Barcelona se han reducido de 105 a 86. Son datos de Alumnes.coop, la federación que las agrupa. Puede haber más cooperativas no federadas.

Daniela es secretaria sustituta de la cooperativa ‘Life Stream Industries’. Hay otros once alumnos y alumnas de 4º de ESO de la Escola Elisabeth de Salou. 

El director de la Escola Elisabeth, Enric Masià, explica que en las cooperativas de alumnos los estudiantes «toman decisiones de forma democrática y desarrollan un espíritu solidario. Debaten, comparten ideas y llegan a acuerdos de funcionamiento».

¿En qué se ha plasmado en la práctica ese «espíritu solidario»? Daniela y sus compañeros recogieron tapones para la Fundación Noelia y organizaron una sesión de cine en la propia escuela y vendieron calendarios para recaudar fondos para una ONG. Además coordinaron el intercambio de libros: los alumnos que inician un curso pueden usar los materiales de los chavales que les han precedido si los libros se encuentran en buen estado de conservación. 

Tarragona: Solidaridad en forma de cooperativas de alumnos

"Es un grupo igualitario de alumnos donde todos expresan sus ideas para un fin no lucrativo y para ayudar a la escuela". Así define Daniela Olivares la cooperativa de alumnos, una especie de grupo de trabajo de compañeros de clase pero que va mucho más allá porque el grupo no solo se organiza con presidente/a, secretario/a y tesorero/a, sino que destila una serie de valores.

No solo es cuestión de solidaridad. También deben aprender. Conocimientos ‘técnicos’: cómo funciona una cooperativa, por ejemplo. Y cuestiones vitales. ¿Cuáles? Oliver Williams, presidente: «Que te sientes mejor si ayudas a los demás». Daniela: «Tienes que implicarte en los trabajos porque no puedes dejar a tu cooperativa sola». Paula Sánchez (secretaria): « Trabajo en equipo». Nayara Bonillo: «He aprendido que hay mucha gente que necesita ayuda y a la que no es tan difícil ayudar». Mauricio Olivares: «Que no es lo que diga yo y ya está, sino que hay que elegir entre todos». ¿Todo esto les servirá en la vida real, cuando abandonen la ‘burbuja’ del instituto o la universidad y se sumerjan en el mundo laboral? La respuesta de los cinco es unánime: sí.

"Tenemos que formar ciudadanos críticos"

Tienen unos socios que deciden las cuestiones estructurales y funcionales de la escuela. En el caso de la cooperativa de padres y madres, son ellos y ellas los que aprueban los presupuestos. ¿Cómo se financian? La mayoría de escuelas cooperativas son concertadas. La parte más importante la asume la Generalitat.

Los trabajos de la cooperativa se desarrollan sobre todo en horas de la clase, pero más de una vez sus componentes han tenido que ir a la escuela en fines de semana o días festivos

Los otros siete cooperativistas son Álvaro Franconetti, Óscar Martínez, Ioannis Charalampidis, Álvaro Jiménez, Pau Sabaté, Álex Cortina y Marc Moraga. 

Las cooperativas de Tarragona se reparten entre la Escola Elisabeth; el Centre d’Educació Especial Verge de la Cinta, en Tortosa (dos); el Institut d’Horticultura i Jardineria, en Reus; la Escola Jaume Huguet, en Valls, la Escola d’Hoteleria i Turisme, en Cambrils; la Escola de Suport Complementari i Acompanyament, en Tarragona; la Escola Agrària, en Amposta; y el Institut Escola Daniel Mangrané, en Jesús (tres). 

¿Recomendarían la experiencia? «Las cooperativas de alumnos se tendrían que implantar en todas las escuelas porque se fomentaría el trabajo en equipo y ayudar a los demás», responde Oliver. 

Comentarios
Multimedia Diari