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Una diva de la canción, alcohólica, caótica y eclipsante (First Lady), pretende ofrecer un concierto dentro de su gira mundial con una tímida y brillante multiinstrumentista con barba (Second Lady) que esconde un gran secreto. La tarraconense Noèlia Pérez y el valenciano Josep Zapater son los protagonistas (y únicos intérpretes) de Two Ladies or Not Two Ladies, un cabaret trágico lleno de humor, gamberrismo y ternura que gira en torno al amor y la música. Se representará mañana (20.30h) en el Teatre el Magatzem y el sábado (20.30h) en la Sala Trono de Tarragona.
«Sin amor no hay vida. La falta de amor puede convertirnos en juguetes rotos, que es lo que son las Ladies», cuenta Pérez, ideóloga del espectáculo junto con su compañero Zapater. Ambos están al frente de la compañía Cashalada, instalada en Valencia.
La obra juega con una rivalidad vocal y musical que genera una química explosiva entre los dos personajes. «La música es la manera que tienen de expresar sus emociones e inquietudes», dice la artista de Tarragona. Interpretan en directo canciones propias y otras conocidas, como Milord, Moon river, Somewhere over the rainbow, Bésame mucho o With or without you. También hay danza, clown, improvisación y funambulismo teatral.
Se estrenó el 8 de marzo de 2015 (Día Internacional de la Mujer). En estos tres años de gira ha llenado el teatro Micalet de Valencia y el Lara de Madrid, «con unas críticas que sube la autoestima a cualquier artista».
La trama transcurre en un ambiente «mágico y decadente a la vez», donde todo sucede de manera espontánea y real. «La realidad tiene mucho de humor, pero también mucha crudeza. Por eso el espectáculo pasa con facilidad de la rosa hilarante a encoger en un puño nuestro corazoncito». Hay sorna, pataleta y cinismo, «porque si ello tampoco habría vida», explica Pérez, que dio sus primeros paso escénicos cantando en Tarragona con Teresa Valls y Núria Delclòs.
Two Ladies or Not Two Ladies es el resultado del trabajo conjunto de dos personas muy diferentes: Pérez, muy recta, y Zapater, un tanto caótico. «Sin darnos cuenta creamos unos álter egos absolutamente contrarios a nosotros. La función nace de las ganas de crear un espectáculo multidisciplinar sin límites ni barreras musicales», afirma la tarraconense, que ha participado en proyectos de calado en Madrid y Barcelona, como West Side Story, Master Class o Hello Doly.
Su compañía, Cashalada, ha creado la música y la letra de tres musicales: Tic-Tac y L’Aneguet lleig, con los que ganó el premio Max; y Merlín, la leyenda, que se llevó tres Broadway y un Premio Teatro Musical. En los tres, su socio y ella han sido los actores principales. «En breve nos iremos con Joan Font (Comediants) a hacer una zarzuela en Oviedo», avanzan.
