Cortan la luz a 17 pisos okupas de un conflictivo bloque de El Serrallo

Los okupas del bloque número 2 de la calle Sant Andreu de El Serrallo –edificio conocido como el Rancho Grande– se han quedado sin luz. Técnicos de Endesa cortaron el pasado martes el suministro eléctrico de los 17 pisos ocupados ilegalmente en este edificio. La compañía asegura que la instalación eléctrica de los inmuebles era, a parte de fraudulenta en algunos casos, muy peligrosa. Por su parte, el Ayuntamiento de Tarragona explica que servicios sociales ha intervenido en el asunto y estudiará caso por caso las necesidades de las familias. 

Los hechos ocurrieron durante la mañana del martes. Agentes de la Guàrdia Urbana y de los Mossos d’Esquadra acompañaron a los técnicos de Endesa para llevar a cabo una visita rutinaria en la instalación eléctrica del edificio. Una vez allí, los técnicos detectaron que el montaje era peligroso. Se encontraba en un estado muy deteriorado, lo que podría provocar un incendio en cualquier momento. «No queremos que pase lo que ocurrió en Badalona a principios de este año, cuando murieron tres personas a causa de una sobrecarga eléctrica, provocada por la luz pinchada», aseguran fuentes de Endesa.

«No queremos que pase lo que ocurrió en Badalona, donde un incendio por la luz pinchada provocó tres muertes», Fuentes de Endesa

Los técnicos detectaron que, de los 34 contadores que había, 15 tenían contrato eléctrico y 19 eran fraudulentos. De éstos últimos, cortaron el suministro de 17 pisos. La mayoría de ellos están ocupados de manera ilegal, y en algunos viven niños. «Fuimos a hacer una revisión rutinaria para detectar posibles irregularidades, pero cuando vimos la precariedad, no solamente en el ámbito eléctrico sino en general, decidimos actuar», aseguran fuentes de la compañía eléctrica. Y es que muchos de los okupas tienen la luz pinchada. Aquellos vecinos que tienen regularizada la situación y son propietarios no se han visto afectados por la medida. 

«Buscaremos soluciones a medida para cada una de las familias del Rancho Grande», Javier Villamayor, Concejal de Seguretat

La policía acompañó a los técnicos hasta el lugar ya que se trata del bloque más conflictivo del barrio marinero. Algunos de los okupas son presuntamente autores de hechos delictivos y generan sensación de inseguridad en El Serrallo. Vecinos, policía y consistorio trabajan conjuntamente para erradicar la problemática.

Soluciones a medida
Ahora, servicios sociales del Ayuntamiento será el encargado de estudiar caso por caso para buscar soluciones. «De los 11 pisos ocupados ilegalmente, hay de dos tipologías: familias con niños en situación de precariedad y okupas autores de delitos. Un trabajador social se entrevistará con los afectados y actuaremos dependiendo de la casuística. Buscaremos soluciones a medida», explicaba este miércoles el concejal de Seguretat, Javier Villamayor, quien añadía que «lo que no podemos permitir es que haya personas viviendo con riesgo de incendio por el estado de la instalación eléctrica». 

Por su parte, la Associació de Veïns del Serrallo aseguraba este miércoles al Diari que no tenía constancia de lo ocurrido.