«La situación está siendo extraordinaria para nosotros con la reactivación de todos los cursos presenciales. Vamos como locos, porque tenemos que preparar a los alumnos en un tiempo récord». Las palabras de Andreu Antolín, director de la academia Aula Magna de Tarragona, ejemplifican lo que se está viviendo en el mundo de las oposiciones a las puertas del levantamiento del estado de alarma en España.
Tras más de dos meses de incertidumbre, los opositores han empezado a tener noticias. Los procesos para acceder a un puesto de funcionario se reactivarán cuando decaiga el estado de alarma. Varias Comunidades Autónomas, entre ellas Catalunya, ya están dando pasos en esa dirección y el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, encargado de dar el visto bueno a las pruebas para la Administración General del Estado, recuerda que debe ser Sanidad el que permita de nuevo los actos multitudinarios, como ocurre en estos exámenes, que pueden llegar a reunir a miles de personas.
En el caso de Catalunya, entre el 13 de marzo y el 30 de abril se congeló toda la oferta pública que iba a salir y durante siete semanas quedó en cuarentena. A partir del 1 de junio se ha reactivado esta oferta pública para todas las convocatorias.
Desde ese día, la actividad en Aula Magna es frenética. Tenemos más de 100 alumos en diferentes horarios preparándose para oposiciones y algunos más que lohacen desde casa», comenta Antolín, quien añade que «2020 y 2021 eran años de muchas convocatorias, por lo que vamos a tope, a pesar de que la suspensión también ha hecho que mucha gente se haya enfriado».
No hay que olvidar que, a pesar del confinamiento, este centro de formación -donde actualmente trabaja una veintena de personas- continuóhaciendo clases telemáticamente, tanto las de ciclos de formación como las de oposiciones.
Ahora, se han tenido que adaptar a la ‘nueva normalidad’ y extremar las medidas de seguridad en el centro. «Garantizamos el metro y medio de distanciamiento entre alumnos, el uso de mascarillas, mamparas para los profesores, etc. La clases son de un máximo de 18-20 alumnos, según el espacio», explica el director de Aula Magna, quien tambén afirma que «la gente está muy sensibilizada. Las clases también se graban y el que quiere las puede seguir por streaming, aunque la gente está respondiendo y está viniendo mucha de forma presencial».
En su comparecencia en la Comisión de Política Territorial y Función Pública del Congreso de los Diputados del pasado 14 de mayo, la ministra Carolina Darias afirmó que las oposiciones presenciales masivas están aplazadas por el tiempo que resulte «imprescindible». Pero ofreció algunas pistas sobre el retorno de los procesos. Se reactivarán cuando finalice la suspensión de los plazos administrativos decretada por el estado de alarma y cuando el Ministerio de Sanidad permita de nuevo la realización de actos multitudinarios.
¿Y las futuras convocatorias?
Darias también garantizó que todos los procesos selectivos que estaban en marcha antes de la declaración del estado de alarma continuarán cuando la situación sanitaria lo permita, pero no se refirió a futuras convocatorias. Este aspecto causa incertidumbre entre muchos opositores, que temen que ante la inminencia de una crisis económica y el mayor endeudamiento del Estado para afrontarla, las convocatorias públicas se frenen en seco, como ocurrió con la crisis financiera de hace una década.
Por ejemplo, las pruebas del Cuerpo de Tramitación Procesal y Administrativa del Ministerio de Justicia; las de los organismos autónomos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) y las de auxiliar administrativo de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), entre otras, quedaron suspendidas por la Covid-19.
El examen de la UNED, previsto para el 22 de marzo, cuenta con más de 10.000 inscritos que aspiraban a 92 plazas. El vicegerente de Recursos Humanos, Alvaro Martín Herrera, y el vicerrector de Personal Docente e Investigador, Miguel Miguens Vázquez, explican que «en el momento en el que se levante la suspensión general de plazos administrativos decretada como disposición adicional en la declaración de estado de alarma continuará el impulso de los procedimientos ya convocados, en la fase en la que quedaron suspendidos».
«También entonces comenzarán a convocarse los procesos selectivos ya autorizados en las ofertas de empleo público y pendientes de publicación», aseguran en la UNED, donde no hablan de un calendario para los exámenes, pero sí indican que la fecha de las pruebas se anunciará con la «antelación suficiente para garantizar el acceso a la información por parte de los aspirantes».
Una encuesta de la plataforma para la preparación de test para opositores Opositatest señala que el 67% de los aspirantes considera que la Administración no ha ofrecido información oportuna sobre cómo la pandemiadel Covid-19 ha afectado a sus oposiciones, pero el 79% subraya que no se ha planteado abandonar el proceso.
