El nuevo Imperial Tarraco tendrá una zona chill out en la terraza y una piscina abocada a la ciudad. Ésta ocupará uno de los extremos del edificio, en concreto, el lateral que da al Passeig de les Palmeres, y su objetivo es generar un ambiente acogedor del que pueda disfrutar la ciudad, más allá de los clientes de este establecimiento hotelero.
Es uno de los aspectos que aparece en el anteproyecto que la nueva propiedad del inmueble, Alta Diamond Projects, ha presentado al Ayuntamiento de Tarragona. También se mantiene la piscina que hay en el jardín y proyecta un gimnasio equipado con las últimas instalaciones en una de las plantas que queda encima del Casino. Allí, sus usuarios podrán ejercitarse en las diferentes máquinas con vistas al Amfiteatre y al mar Mediterráneo. Son algunos de los detalles que ya ha podido conocer el concejal de Territori, Josep Maria Milà, a la espera de tener encima de la mesa el documento definitivo.
Cuando han pasado más de cinco meses desde que los últimos 37 empleados abandonaron el inmueble, el responsable de llevar a cabo esta reforma está ultimando un chequeo de la estructura para conocer con exactitud el alcance de la intervención. Según Milà, «estructuralmente el edificio está bien», por lo que la intervención consistirá en una «reforma integral» de un inmueble construido en 1963 y en el que el mantenimiento había sido el mínimo.
Patrimoni y Bombers
En esta fase se están evaluando también los aspectos relacionados con la seguridad y las salidas de emergencia. Toda esta información debe servir para acabar de redactar el proyecto definitivo, que podría conocerse a finales de este mismo mes de noviembre. No obstante, el edil socialista concreta que este trabajo previo también debe servir para acortar otros dos trámites para que finalmente pueda concederse la licencia.
Estéticamente la parte exterior del edificio prácticamente quedará igualEl primer trámite es la luz verde por parte de la Comissió Territorial de Patrimoni Cultural de la Generalitat, la cual valorará el impacto que puede tener la reforma del hotel en el entorno patrimonial que conforma el Amfiteatre y el Circ. En un primer momento no se prevé que por esta parte se presenten complicaciones. «Estéticamente el edificio prácticamente quedará igual», asegura Milà.
En segundo lugar, Bombers de la Generalitat examinará todos aquellos aspectos relacionados con la seguridad del edificio. Para evitar que esta fase pueda alargarse se está llevando a cabo este trabajo previo.
Inicios del año que viene
El responsable municipal apunta que, superados estos obstáculos, en un periodo de «entre tres y cuatro meses» la empresa podría tramitar la licencia para iniciar la intervención.
La intervención se prolongará por espacio de 18 mesesEn el proyecto, que aún no es el definitivo, la propiedad y la gestora establecen que el emplazamiento reducirá las plazas que éste tenía en la anterior etapa. Se debe al hecho de que se prescindirá de las habitaciones que no tenían vistas al mar cuando cerró, de forma que las nuevas serán más alargadas, con un balcón más grande y todas las camas con vistas al Mediterráneo. Además, el hotel, que quiere tener una catalogación de cuatro estrellas superior, tendrá una zona con apartamentos.
El fondo de inversión podría iniciar las obras de remodelación de este histórico inmueble durante el primer trimestre del año que viene, unos meses más tarde de lo que en un primer momento estaba previsto.
Fuentes municipales indican que la inversión que se llevará a cabo oscila entre los ocho y los diez millones de euros, y que el periodo de obras se alargará –como mínimo– durante 18 meses, por lo que no se prevé que el espacio pueda volver a abrir al público, como muy pronto, hasta finales de 2019.