La valoración por parte de los profesionales sanitarios de la puesta en marcha de la nueva UCI Pediàtrica es buena. Pero la mayoría coincide en que es necesario más personal para poder explotar de manera correcta la totalidad de los equipamientos.
«Lo ideal sería que hubiera ocho pediatras en jornada ordinaria –de ocho de la mañana a cinco de la tarde–, entre las dos UCI», asegura Mar Albújar, Cap de Secció de la UCI Mixta, quien añade que «esta sería la plantilla completa». Pero actualmente no es así.
Son seis pediatras en total, pero uno está de baja y otro no se puede sustituir, lo que implica que, en la actualidad, el servicio cuenta con la mitad del personal necesario. «Nosotros reivindicamos más médicos, pero nos consta que el hospital está trabajando en el mismo sentido», explica Albújar.
Por su parte, Ester Castellarnau, Cap de Servei de Pediatria, asegura que «ahora es necesario estabilizar la plantilla. En esto estamos batallando», y añade que «entendemos que las plazas deben seguir su tramitación».
Por su parte, la unidad cuenta con cuatro enfermeras y dos auxiliares de enfermería por turno. En este caso, la supervisora Elena Mateo reivindica un refuerzo con otra enfermera en la UCI Neonatal.
Desde el mismo hospital aseguran que no es sencillo encontrar profesionales de calidad especializados en pediatría, que den la talla en las plazas que se ofrecen.
Algunos sindicatos denuncian que el problema de la falta de personal acaba afectando al servicio, porque no se aprovecha la totalidad de los equipamientos. Según aseguran fuentes sindicales, «la UCI Pediàtrica no acaba de funcionar».