Más del 20% de los tributos directos que pagan los ciudadanos de Tarragona se abonan ya de forma avanzada –para lograr el descuento del 2,5%– o mediante diez plazos para facilitar el cumplimiento de la obligación fiscal con el Ayuntamiento. Según los datos que maneja la corporación local, a día de hoy está previsto ingresar 14,7 millones entre las dos vías alternativas al abono convencional de la domiciliación de mayo –cuyos recibos se pasarán este próximo viernes– o el pago mediante código de barras en una entidad bancaria tras recibir la carta por parte de la administración municipal.
Entre las fórmulas más nuevas destaca que ya son 11.150 los contribuyentes que apuestan por fraccionar el pago de los tributos locales correspondientes al IBI, el impuesto de circulación y la tasa de la basura. Entre estos tres conceptos impositivos el consistorio ha presupuestado recibir este año unos 71 millones de euros (49 del IBI urbano, 15 de la basura y 6,8 de los vehículos), de los cuales más de 11,6 se ingresan de manera fraccionada los días 5 de cada mes entre los meses de marzo y diciembre.
Cabe destacar que este año la tasa de la basura se ha incrementado en un 28%, mientras que se han congelado el IBI, el impuesto de vehículos de tracción mecánica y el IAE. Se da el caso, sin embargo, de que el IBI de la ciudad es el segundo más alto entre las principales capitales españolas, solo por detrás de Lleida.
En alza desde el coronavirus
Desde la explosión de la pandemia del coronavirus, la vía del fraccionamiento ha incrementado de manera significativa su número de usuarios. Así, mientras que si en 2019 eran 10.717 los ciudadanos que apostaban por esta vía, en 2020 ya se superó la barrera de los 11.000, consolidándose en estos términos en 2021, un año también con restricciones por la Covid y ERTE en muchas empresas de la ciudad.
Asimismo, a raíz del aumento de los precios por la inflación generada por la guerra en Ucrania, en 2022 la cifra llegó hasta los 11.326. Este 2023, con los costes energéticos y de los alimentos estabilizados pero con un nivel de coste de venta al público muy superior al de antes de dispararse la inflación, el volumen es de 11.150, si bien cabe destacar que hay tiempo hasta el mes de junio para solicitar esta modalidad. Así, si esto se pide antes de verano el fraccionamiento es en seis pagos, de junio a diciembre.
El concejal de Serveis Centrals, Jordi Fortuny (ERC), destaca que el aplazamiento del pago de los tributos a lo largo de todo el año no supone el cobro de «intereses», a la vez que calcula que en los dos meses que quedan de plazo «las cifras llegarán a ser similares a las de 2022». De media, el pago de cada contribuyente que divide el pago es de 1.061 euros que, en diez recibos, se traduce en unos 106 euros al mes.
Asimismo, este 2023 ha llegado a su máximo histórico el número de contribuyentes que apuesta por pagar todos sus tributos de forma avanzada en febrero: 2.071, una cifra que es un 2,7% superior a los 2.017 de 2022. Desde 2020, el volumen de ciudadanos que apuesta por esta vía, que permite un descuento del 2,5% por pronto pago, está por encima de los 2.000 ciudadanos. Este 2023, la estimación es que los beneficiarios de esta fórmula afronten un recibo de 1.489 euros.
El presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Tarragona (FAVT), Alfonso López, asegura que «es importante tener opciones para poder pagar los impuestos, pues por desgracia a muchas familias les cuesta llegar a final de mes debido al encarecimiento del nivel de vida». Asimismo, López recalca su «preocupación» por el hecho de «tener uno de los IBI más caros del país».