El Ayuntamiento de Tarragona quiere un evento de primer nivel como La Vuelta a España en la ciudad «cada uno o dos años». Así lo asegura al Diari el concejal de Turisme Esportiu, Berni Álvarez (PSC), quien considera que, tras albergar el final de la cuarta etapa de la competición ciclista, «hemos vuelto a demostrar que Tarragona es una auténtica capital deportiva que puede acoger competiciones de primer nivel». «La Vuelta es una gran oportunidad para proyectar nuestra ciudad en el mundo, con un impacto económico enorme», añade el segundo teniente de alcalde, en referencia a los 325.000 euros que se calcula que dejaron en la ciudad las casi 3.000 personas que forman la comitiva de la cita ciclista.
Por ello, tras felicitarse por el «reto logrado» con La Vuelta, ahora el gobierno municipal intensificará a partir de septiembre los contactos con las federaciones deportivas «para analizar costes, cánones e impacto económicos», ya que «son eventos que generan un gran impacto, tanto de promoción para la ciudad como en actividad para el sector hostelero y en pernoctaciones» porque «Tarragona es atractiva y un destino que puede ser referente en el turismo deportivo. Ya lo notamos por la forma con la que nos reciben las ligas profesionales».
En este sentido, el edil socialista anuncia que el ejecutivo de la Plaça de la Font ya tiene «avanzadas» las negociaciones para albergar otra competición de «primer nivel» a final de año. «Sería en diciembre, esperamos que pueda cerrarse en breve», indica Álvarez, quien destaca que, en esta ocasión, la época del año «no será estival, por lo que también ayudará a la ocupación hotelera».
Paralelamente, el máximo responsable deportivo del gabinete del alcalde Rubén Viñuales (PSC) resalta que un punto de inflexión se dará con la apuesta por el Anillo Mediterráneo, donde el consistorio invertirá dos millones de euros en los dos próximos años.
Especialmente significativa es la dotación económica para el Palau d’Esports: 915.000 euros entre las gradas (600.000) y el parqué (315.000), además de los 500.000 para el estadio de rugby, los 48.000 para el velódromo y el Next Generation de 600.000 solicitado para adquirir la manta térmica para climatizar la piscina olímpica Sylvia Fontana (300.000) y la otra mitad para los vestuarios y las gradas móviles del campo de rugby. «Queremos crecer, y hemos demostrado que tanto a nivel logístico como social estamos preparados para estar en el mapa de los grandes eventos», sentencia Berni Álvarez.
Cara y cruz
El presidente de la Associació d’Empresaris de l’Hostaleria de Tarragona (AEHT), Francesc Pintado, destaca que la promoción que la presencia de La Vuelta ha supuesto para el territorio tarraconense «ha sido súper positiva, interesante y de muy alto nivel». «Transversalmente, ha puesto el foco en Tarragona, con una fotografía y una retransmisión en directo espectacular, donde se apreció la luz, el mar y la Part Alta de la ciudad. El retorno de todo esto vendrá seguro a medio plazo», indica.
A nivel hotelero, Pintado afirma que, al ser un mes de agosto, estos «ya están a un 90%», pero añade que «todo suma». «Los equipos mayoritariamente se hospedaron en Port Aventura, pero siempre hay movimiento a nivel de prensa por todo lo que comporta La Vuelta a nivel de restauración y de comercio. El evento fue positivo en todos los sentidos», destaca.
Uno de los establecimientos céntricos de Tarragona es el de Rafa Olivier. «A las cafeterías y las heladerías les fue muy bien. Se vio mucho ambiente y gente en la ciudad. Fue una buena promoción pese a que los corredores no durmieron aquí», afirma. Por su parte, más crítico fue el también botiguer Melcior Bustos, propietario de El Lloro de la Negrita. «Faltó comunicación sobre las calles que se cortaban. El consistorio no nos informó de nada, todo lo que supimos fue por el Diari y las redes sociales», lamentaba. Ya hay, pues, asignatura pendiente para la próxima gran cita.