Un salivazo infecta a tres policías de Mont-roig y deja al cuerpo en cuadro

El segundo rebrote nuevo que ayer se conoció afecta a cuatro personas vinculadas con Almoster que se habrían contagiado tras recorrer parte del Camino de Santiago. De estos nuevos casos, uno de los enfermos está en la UCI

17 julio 2020 18:40 | Actualizado a 24 julio 2020 17:39
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Tres agentes de la Policía Local de Mont-roig han dado positivo esta semana de Covid-19. La confirmación por PCR del contagio ha motivado el aislamiento de otros compañeros y ha dejado el cuerpo de seguridad local bajo mínimos, hasta el punto de que Mossos han incrementado la presencia en la localidad. El Departament de Salut confirmó el nuevo brote, que afecta a un total de 41 personas, entre enfermos y gente que ha estado en contacto directo.

El origen del contagio en Mont-roig no está demostrado, pero una de las hipótesis que se baraja dentro de la Policía Local es un salivazo de un detenido a principios de mes que se negaba a ser arrestado por dos de los agentes ahora contagiados. El tercer enfermo está en la UCI del hospital Sant Joan de Reus. Él estuvo en contacto con sus compañeros en el cambio de turno y evoluciona de la enfermedad, aunque su estado es reservado.

El contagio ha sido un golpe duro en la Policía Local, que aplica a rajatabla las medidas de seguridad sanitaria: pulverización de la comisaría antes de cada turno, limpieza exhaustiva de los coches, mascarillas, geles, distancia…. Pero aun así, si el salivazo fue el origen, de nada sirvió el protocolo de seguridad. Desde la detención del delincuente hasta este lunes día 13, los agentes y gente vinculada a la comisaría habían pasado una prueba del coronavirus con resultado negativo. Sin embargo, el test falló a los tres enfermos y dos días más tarde los síntomas confirmaron que tenían la Covid-19.

El Ayuntamiento de Mont-roig, ante el problema de seguridad generado, habló con Mossos para plantear la necesidad de reforzar la presencia de patrullas. La petición se elevó hasta la Dirección General de Policía y desde el pasado miércoles los agentes autonómicos actúan en Mont-roig y Miami Platja para ayudar a los pocos agentes locales que han evitado la enfermedad y el aislamiento.

A la vuelta de vacaciones

El brote de coronavirus localizado en Mont-roig no fue el único nuevo que el Departament de Salut de la Generalitat dio a conocer ayer. El segundo brote que se añade a los cinco ya conocidos este mes de julio en las comarcas del Camp de Tarragona se localizó en Almoster, donde cuatro personas han dado positivo tras volver de hacer el Camino de Santiago. Estas cuatro personas, una de ellas confinada en la región sanitaria de Girona, que es donde vive, dieron positivo esta semana y están en aislamiento.

Salut no ha confirmado si alguna de ellas está hospitalizada. Además de los 4 enfermos, otras ocho personas han sido aisladas tras haber mantenido contacto con los afectados.

Así, con los casos de Mont-roig y Almoster, los rebrotes en la zona de Tarragona suben a siete: Tarragona, Perafort, Les Borges del Camp, Valls y Torredembarra. Estos cinco brotes ya conocidos suman 26 personas contagiadas y 139 personas vigiladas.

En los casos de los brotes de Tarragona, Perafort y Torredembarra su origen está en el ámbito familiar; el de Valls y Mont-roig sería laboral y el de Almoster, tras volver de un viaje turístico.

Dos positivos en Ebre

Las pruebas diagnósticas efectuadas en el hospital de la Santa Creu de Jesús, en Tortosa, tanto al personal sanitario como a las personas ingresadas que hubieran podido estar en contacto con algunos de los casos positivos detectados esta semana, han dado como resultado dos nuevos positivos. Se trata de dos profesionales del centro, que ya se encuentran aislados.

Con estos dos nuevos casos, la cifra de personas infectadas en el centro sanitario de titularidad municipal es de seis: tres profesionales sanitarios y tres pacientes que ya estaban ingresados. Como medida de prevención, desde esta semana se ha restringido el acceso tanto al hospital como a la residencia, ya que constituyen un grupo de personas mayores, vulnerables.

La alcaldesa de Tortosa, Meritxell Roigé, insiste en pedir a la ciudadanía que extreme todas las precauciones a la hora de salir de casa y relacionarse. Y remarca la necesidad de que todo el mundo utilice mascarillas en todo momento, que se incremente el lavado de manos y que se mantenga la distancia de seguridad.

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