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La Associació de Jubilats de Torreforta, presidida por Josep Albert, ya tiene marcada en el calendario la fecha del domingo 8 de febrero. Dentro de siete días, a partir de las 18.30 horas, la entidad presentará Un creuer musical pel Mediterrani, una recopilación de canciones de países bañados por el Mare Nostrum de todas las épocas.
La actuación contará con la participación de siete entidades: la Coral de Torreforta, la Coral de la Parròquia de Sant Josep (del mismo barrio), la Coral de Sant Pere i Sant Pau, la Coral Castellano-Aragonesa, la Coral Sant Magí, la Coral del Serrallo y el Esbart Dansaire de Tarragona.
«Hace dos años debutamos en el Teatre Tarragona con una recopilación de zarzuelas que fue todo un éxito. Este año queremos cambiar el estilo musical, pero confiando en que guste igual al público que venga a vernos», explica Josep Albert.
Las entradas, ya a la venta en las llars de jubilados que tienen una coral participante también estarán en las taquillas del Teatre Metropol esta semana. El precio es de 5 y 7 euros y el aforo ronda las 700 butacas. El espectáculo juntará a todas las corales, unos 200 participantes, y se interpretarán canciones de Catalunya, Francia, Italia, Grecia, Israel y Marruecos.
Las formaciones han ido ensayando por su cuenta desde hace tres meses y ayer, en la sala de la parroquia de Torreforta, realizaron el primer ensayo conjunto para coordinar el espectáculo. «Estamos preparados», concluyó el presidente de la Llar de Jubilats de Torreforta.
Santa Àgata y el ‘boy’
Paralelamente a la gran actuación musical prevista para el próximo domingo, la Associació de Jubilats de Torreforta ha preparado un programa de actividades en honor de Santa Àgata y a las mujeres asociadas.
Aunque el primer evento es el martes con un concurso de tortillas y postres (no hay ganador por especialidad y se sortearán dos jamones, uno por cada modalidad), el día más señalado será el miércoles por la tarde.
Desde hace más de una década, la entidad organiza una merienda servida por los hombres jubilados y seguidamente se retiran y dejan paso al espectáculo sólo para mujeres. Se trata de la actuación de un ‘boy’ que anima la velada a las asociadas. Tras el espectáculo, se abre el baile para todos los jubilados para terminar la fiesta. El aforo de la sala es de 170 personas y sólo se permite la entrada a las asociadas.
