El Tiempo
Estado Carreteras
Whatsapp
Encuesta
Directorio Empresas
Innegablemente Tarragona es una región con un alto nivel de atractivo en términos turísticos, pero cuando llegan las vacaciones muchos habitantes de la provincia catalana se decantan por ir a otros lugares de España. Cambiar de aires y descubrir otras zonas son los principales motivos que alegan, pero ¿concretamente qué localizaciones son las que acostumbran a visitar?
Una de las más frecuentadas por los tarraconenses es Tenerife. Durante el transcurso del 2018, especialmente en los meses de verano, muchos se dieron cita en la popular isla de las Canarias. Ello no es de extrañar teniendo en cuenta una serie de puntos que, con el paso del tiempo, han convertido a este enclave en el favorito de muchos catalanes.
Posibilidad de recorrer cómodamente la isla con un coche alquilado
La gran comodidad que ofrece un Rent a Car Tenerife es valorada muy positivamente por los tarraconenses. Y no es para menos, puesto que al ir de vacaciones a otra ubicación no es plato de buen gusto lidiar con los horarios del transporte público, retrasos y otros contratiempos que son fácilmente evitables disponiendo de un vehículo.
En la isla existen multitud de negocios que son plenamente conscientes de lo confortable que llega a ser el hecho de recorrerla con un automóvil. Es por ello que se emplazan en la región diversas empresas cuyas flotas son muy amplias, satisfaciendo así los gustos y las necesidades de todo tipo de viajeros.
Por ejemplo, en el caso de Atlas Car los modelos alquilables comprenden desde el Dacia Sandero que tanto triunfa en ventas mes tras mes en toda España y un Nissan Micra ideal para grupos pequeños de turistas hasta un Mercedes Clase B para los más exigentes, amén de furgonetas que resultan idóneas en caso de viajar con múltiples familiares y/o amigos.
El perímetro tinerfeño no llega a superar los 350 kilómetros en total, por lo que el coche se convierte en un aliado indispensable para el viajero medio que ve cómo gracias a este tipo de empresas puede disponer de un medio de transporte libremente y sin que la inversión a realizar para tal fin sea muy elevada, sino todo lo contrario.
Proximidad, otro factor determinante
Cada vez tienen más éxito los destinos vacacionales que se emplazan a no demasiada distancia del punto de origen. De hecho, según los psicólogos un trayecto de vuelta que supere las ocho-diez horas da pie a que el síndrome postvacacional sea más intenso, con todo lo negativo que ello acarrea.
Afortunadamente Tenerife se encuentra ubicada a solo tres horas y media en avión. Ello repercute en, por ejemplo, no perder la práctica totalidad de un día de vacaciones simplemente desplazándose hasta el lugar escogido, lo cual también supone una ventaja impagable.
Profundizando en el factor precio, conviene destacar que la ruta Tarragona-Tenerife es cubierta por aerolíneas de bajo coste como Jetcost ofreciendo billetes realmente muy asequibles, aspecto que también es crucial al elegir entre varias opciones, decantándose un gran porcentaje de turistas por la alternativa más económica.
Hospitalidad de los lugareños
Antes de entrar de lleno en los encantos propios con los que Tenerife premia a todos los viajeros que ponen los pies en ella es necesario sacar a colación un aspecto que los catalanes tienen muy en cuenta a la hora de elegir destinos vacacionales: la hospitalidad con la que son recibidos allí donde van.
En el caso de los tinerfeños la amabilidad es sacada a relucir desde el primer momento. Sentirse a gusto y arropado es algo que gusta a todo turista, por lo que es comprensible que impacte tan positivamente en ellos la simpatía natural que destilan los lugareños al tratar con visitantes de cualquier rincón del mundo.
Interminable lista de atractivos
Una de las características más destacables de la isla tinerfeña reside en su versatilidad, haciendo referencia a que se adapta a los gustos de absolutamente cualquier tipo de turista. Para tal fin dispone de un listado de atractivos que parece infinito. Por ejemplo, aquellos catalanes a quienes les entusiasman los parajes naturales no dudan en visitar en primer lugar el Parque Nacional del Teide.
Precisamente dicho enclave puede ser visto a la perfección desde otra ubicación que gusta mucho a los tarraconenses amantes de la diversión en estado puro: el Lago Martiánez, un centro de ocio que destila belleza por todos los poros con las diversas islas que lo conforman, impactando a los turistas que se deleitan con cada zona acuática que visitan.
El número de playas imprescindibles que se encuentran repartidas por toda la isla es elevadísimo, así como el de monumentos emplazados en el casco histórico: Almácigo de Arona, Castillo de San Juan Bautista, etcétera. Así pues, este amplio abanico de posibilidades hace de Tenerife un destino ideal para los catalanes que quieren vivir una experiencia turística inolvidable y muy gratificante.
