La elección de un nuevo Papa es un proceso cargado de simbolismo y tradición que se desarrolla en el corazón del Vaticano. Tras la muerte o renuncia del pontífice, los cardenales de todo el mundo se reúnen en un cónclave en la Capilla Sixtina para escoger a su sucesor. Uno de los aspectos más conocidos de este proceso son las fumatas, las señales de humo que anuncian si ha habido o no una elección.
¿Qué son las fumatas?
Las fumatas son señales de humo que se emiten desde una chimenea instalada en el tejado de la Capilla Sixtina y que son visibles desde la plaza de San Pedro. Existen dos tipos:
Fumata negra: indica que no se ha alcanzado la mayoría necesaria para elegir al nuevo Papa. Se produce quemando las papeletas con una mezcla especial que genera un humo oscuro y denso.
Fumata blanca: significa que ha sido elegido un nuevo pontífice. Se genera añadiendo productos químicos que aseguran una combustión limpia y blanca.
Desde 2005, para evitar confusión, la fumata blanca se acompaña del repique de las campanas de la basílica de San Pedro.
¿Cómo se desarrolla el proceso?
La cronología del cónclave Papal sigue un ritual estricto:
1. Sede Vacante: El proceso comienza oficialmente cuando la Sede Apostólica queda vacante, ya sea por fallecimiento o renuncia del Papa. Se convoca entonces a los cardenales menores de 80 años a Roma.
2. Congregaciones generales: Durante los días previos al cónclave, los cardenales se reúnen en sesiones para tratar asuntos organizativos, preparar el cónclave y conocerse mejor entre ellos.
3. Inicio del cónclave: Todos los cardenales electores se trasladan a la Casa de Santa Marta, donde permanecerán aislados hasta que haya una elección. La Capilla Sixtina se convierte en el lugar exclusivo de votación, bajo estrictas medidas de seguridad y secreto.
4. Votaciones y horarios:
El primer día del cónclave se realiza una sola votación por la tarde.
A partir del segundo día, se celebran cuatro votaciones diarias, divididas en dos bloques:
- Dos votaciones por la mañana, entre las 9:30 y las 12:00.
- Dos votaciones por la tarde, entre las 16:00 y las 18:30.
Después de cada bloque (mañana y tarde), se quema el resultado de las papeletas y se emite la fumata correspondiente, generalmente hacia el mediodía (alrededor de las 12:00) y al atardecer (cerca de las 19:00).
5. Elección y aceptación: Cuando un cardenal alcanza la mayoría requerida (dos tercios de los votos), se le pregunta si acepta el cargo. Si responde afirmativamente, se le pregunta qué nombre Papal desea adoptar.
6. Anuncio al mundo: Se produce la fumata blanca y suenan las campanas. Minutos más tarde, el cardenal protodiácono anuncia desde el balcón central de San Pedro el tradicional Habemus Papam, seguido de la aparición del nuevo pontífice ante la multitud.