El expresidente de Uruguay, Pepe Mujica, ha muerto este martes a los 89 años a causa de un cáncer. El político uruguayo anunció a principios de mayo que se le había detectado un tumor en el esófago y que el tratamiento se complicaba por la enfermedad inmunológica que también le había afectado los riñones. Nacido en Montevideo el 20 de mayo de 1935, Mujica fue presidente de Uruguay entre 2010 y 2015, y también fue senador por el Frente Amplio. Entre otras cosas, la figura de Mujica adquirió relevancia a nivel mundial por haber renunciado a vivir en la residencia presidencial durante los años en que fue el máximo dirigente del país, por haber renunciado a su sueldo como expresidente y destinar la mayor parte de su salario a causas benéficas, entre otros gestos.
Durante los años sesenta, Mujica fue guerrillero del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros. Resultó herido de bala en enfrentamientos armados, fue detenido y escapó de prisión dos veces. La última vez que fue detenido pasó 13 años en prisión, desde 1972 hasta 1985, durante la dictadura que gobernó el país sudamericano.
Con el retorno de la democracia, Mujica salió de prisión gracias a la ley que decretaba una amnistía para delitos políticos, comunes y militares. Años más tarde, fundó junto a otros exguerrilleros el Movimiento de Participación Popular, dentro del Frente Amplio. Primero fue elegido diputado y luego senador.
En 2005, el presidente Tabaré Vázquez lo nombró ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, un cargo que ocupó hasta 2008. Dos años después, se convirtió en presidente de Uruguay tras unas elecciones que ganó con cerca del 55% de los votos en segunda vuelta contra Luis Alberto Lacalle, del Partido Nacional. Al asumir la presidencia, Mujica renunció a vivir en la residencia presidencial y continuó viviendo con su esposa en su chacra en las afueras de Montevideo.
Posteriormente, volvió a ocupar un cargo público al ser elegido senador en las elecciones de 2014 y 2019. En 2020 se retiró de la actividad política y dejó el cargo.
Durante su gobierno, apostó por el gasto social e incrementó el salario mínimo. Una de las iniciativas más relevantes fue el plan para proporcionar vivienda a familias vulnerables, financiado con aportaciones de empresas privadas y para el cual renunció a parte de su sueldo. Otra política destacada de su mandato fue la venta de propiedades estatales en desuso.
Tomó decisiones que fueron objeto de polémica, como legalizar y regular la venta de marihuana, legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo, despenalizar el aborto o aceptar presos de Guantánamo. También pronunció un discurso en el que reconoció públicamente la responsabilidad del Estado uruguayo en las violaciones de derechos humanos durante los años de la dictadura.
El presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, ha comunicado la muerte de su predecesor a través de la red social X: “Con profundo dolor comunicamos que ha muerto nuestro compañero Pepe Mujica. Presidente, militante, referente y conductor. Te vamos a extrañar mucho, viejo querido. Gracias por todo lo que nos has dado y por el amor profundo por tu pueblo”, ha escrito.