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Un hombre que se enfrentaba a nueve años y medio de prisión por haber violado a su esposa ha sido finalmente absuelto por la Audiencia Provincial de Tarragona. El fiscal también le pedía tres años más por un delito de maltrato habitual, del cual también ha sido absuelto. En cambio, la Sección Cuarta lo ha condenado a pagar una multa de 3.000 euros –el fiscal pedía tres años de cárcel– por un delito de lesiones.
La sentencia declara probado que la pareja contrajo matrimonio en 1978, del que nacieron dos hijas. En 1992 o 1993, y en el transcurso de una discusión, el acusado propinó un manotazo a la víctima, impactándole en el rostro, lo que provocó que sangrara por la nariz.
La relación matrimonial se fue degradando con el paso del tiempo, con desencuentros afectivos y un clima de falta de respeto mutuo. Las discusiones eran frecuentes desde siete años antes de la separación, ocurrida en 2015. No ha quedado acreditado que entre 1992 y el 4 de enero de 2015 el procesado golpeara a la mujer, la lanzara al suelo y la pateara. Ni tampoco que la violara ni que pretendiera mantener relaciones sexuales por la fuerza.
El 4 de enero de 2015 iniciaron una fuerte discusión y se profirieron insultos. Ella le conminó a que debían liquidar el patrimonio común para que cada uno reiniciara su vida. La discusión derivó en mutuas agresiones. El acusado agarró a la mujer por la cara y le propinó un empujón. La víctima cayó al suelo, golpeándose en la zona occipital con la estructura de la cama. Los magistrados reconocen que la relación de pareja y convivencia durante 36 años ha venido marcada por «desencuentros afectivos e inestabilidad»
