La Generalitat aparta al interventor de Vila-seca

Carlos G.L., interventor del Ayuntamiento de Vila-seca, ha dejado temporalmente sus funciones. El motivo no es otro que la apertura de un expediente disciplinario por parte de la Direcció General d’Administració Local de la Generalitat de Catalunya, órgano competente en la fiscalización del trabajo de las áreas de intervención municipales.

Fuentes consultadas por este rotativo han confirmado que la apertura del expediente se conoció el pasado viernes día 1 de febrero, si bien la notificación oficial ha llegado esta mañana al despacho del interventor.

La apertura del expediente significa la suspensión y separación cautelar de sus funciones porque se entiende que en el transcurso del ejercicio de sus responsabilidades ha podido cometer supuestas faltas que al analizarlas se pueden considerar hasta graves.

Ante este hecho, el interventor ya no fiscaliza el Ayuntamiento de Vila-seca y el consistorio se verá obligado en los próximos días en designar a algún funcionario estas competencias de forma provisional. Se desconoce con exactitud cuánto tiempo la Direcció General d’Administració Local necesita para resolver el expediente, pero fuentes conocedoras de la administración local calculan un mínimo de seis meses.

Las mismas fuentes consultadas señalan que el expediente ha sido incoado por el órgano de la Generalitat sin que el Ayuntamiento haya intervenido en esta decisión. Ahora, falta saber la resolución que tome el órgano competente.

¿Cuáles han sido los motivos?

A día de hoy, la información que ha justificado la apertura del expediente no se ha dado a conocer. Fuentes municipales han declinado dar ninguna explicación más allá de la confirmación del expediente y remarcando que es un expediente que está todavía en fase de resolución y se debe ser respetuoso con el procedimiento, declinando hacer valoraciones que puedan interferir o confundir el procedimiento abierto.

Sin embargo, a nadie se le escapa que la decisión de la Direcció General d’Administració Local de la Generalitat tiene que ver en las dificultades generadas en la gestión diaria del Ayuntamiento en cuanto al pago de proveedores, nóminas a trabajadores y problemas en la adquisición de material o vehículos para las diferentes áreas de la corporación vila-secana.

Sin ir más lejos, las nóminas de este enero se han cobrado parcialmente. Unas el pasado viernes y otras a fecha de hoy. E incluso no se descarta que trabajadores de los patronatos todavía no tengan su nómina a fecha de hoy.

Hace unos meses salió a la luz el retraso en el pago de proveedores que manchaba la gestión municipal de la que se enorgullecía el alcalde Josep Poblet y todo su equipo de gobierno. Una gestión que había llevado a Vila-seca a tener un déficit cero y que ofrecía un ejemplo de fiscalización municipal digno de envidia a nivel de todo el Estado español.