Vila-seca planifica la lucha contra la pandemia 2021 con recursos propios

El presupuesto aprobado aumenta las partidas para las personas en ayudas directas, formación y plan de ocupación 

05 enero 2021 22:50 | Actualizado a 07 enero 2021 06:53
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Vila-seca ha activado para este 2021 uno de los presupuestos más complejos de las últimas décadas. La pandemia alteró las partidas de 2020 (para ayudar a las personas más vulnerables de la ciudad) hasta el punto que «no sabemos a fecha de hoy cuánto se ha gastado por encima de lo presupuestado», admite el concejal de Hisenda, Xavier Farriol. De hecho, la realidad numérica de 2020 se conocerá en abril, cuando se liquidará el presupuesto del año anterior y se conocerá con precisión si queda dinero «en la caja» o los números definitivos se tiñen de rojo.

A pesar de la incertidumbre de cuadrar las cifras del año anterior, el nuevo ejercicio sigue apostando por una de las áreas claves: servicios sociales. La lógica impera en todos los partidos políticos representados en la ciudad. La pandemia sigue muy vigente y la necesidad de ayudar a las personas está por delante de otros proyectos de ciudad que en el pasado tenían mayor peso dentro de las cuentas generales.

«Sufriremos para obtener ingresos este ejercicio y todavía no sabemos la ‘salud’ de las cuentas de 2020», Xavier Farriol (concejal de Hisenda)

Este 2021 la apuesta asciende hasta los 3.369.260 euros divididos en dos grandes áreas: servicios sociales básicos (más de 2,4 millones) y fomento de la ocupación (casi rozando el millón de euros restante).

«Es un esfuerzo muy importante que haremos en Vila-seca y que ha sido posible con la suma de todos, gobierno y oposición», reconoce Farriol. «Todos los grupos han aportado ideas y se han ensamblado para que todo el mundo esté satisfecho», añade el edil, que recuerda que en el pleno del pasado 30 de diciembre, el presupuesto contó con la unanimidad de todos.

La estrategia de 2020 fue usar todo el dinero reservado de otros años más fructíferos. En éste, la idea de momento sigue pasando por los remanentes y recursos propios. «Vila-seca sigue siendo una ciudad sin deudas y mientras pueda utilizará sus recursos», explica el edil.

Con estos parámetros, y sabiendo ahora que la crisis económica provocada por la pandemia todavía está muy presente, el consistorio ha elaborado el presupuesto pensado para las personas más necesitadas. No es fácil calcular cual es el incremento respecto a 2020 pero Farriol admite que si no se ha doblado estará en una cifra aproximada.

Algunas tasas e impuestos suben con el fin de obtener ingresos para las subvenciones

Entre las partidas previstas en 2021 hay una ayuda pensada para las pequeñas empresas de dos o tres empleados. Estas subvenciones se han creado para poder equilibrar las tasas que recauda el consistorio, y aunque no se ha dicho muy alto, han subido. «Hay que admitir que los recursos propios deben ayudar a los más necesitados, pero hay que recaudarlos. Es el primer incremento de ordenanzas desde 2008», recuerda el concejal, que remarca que la subida tuvo apoyo unánime.
El pleno de ordenanzas fiscales se convocó el 23, una semana antes que el de presupuestos. Así podían entrar en vigor este primero de enero.

A pesar de este incremento moderado de los impuestos y tasas, Farriol admite que «sufriremos para obtener ingresos y todavía con la incógnita de cómo han quedado las cuentas del año pasado. La recaudación de 2020 será baja y claramente inferior a la presupuestada a principios de año».

Las tasas y las rebajas

Durante 2020 muchas de las protestas locales, sobretodo del sector turístico y la restauración, exigían la cancelación de tasas durante los meses de inactividad. Farriol admite que la propuesta parece fácil de ejecutar, pero que jurídicamente es compleja. Este año se intenta equilibrar el pago de las tasas con las ayudas a las microempresas para poder «anular» los impuestos cuando sea necesario.

«Se puede modificar a la baja un impuesto, pero hay que reflexionar que los ingresos más importantes llegan de las grandes industrias. Si rebajas las tasas, el beneficiario es la gran empresa y el perjudicado el Ayuntamiento con una reducción de la recaudación», justifica el edil.
Vila-seca aprobó su presupuesto, que asciende a 32,7 millones de euros, de los cuales 3,12 están destinados al Patronat de Turisme y al de Música.

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