Los alcaldes de Calafell, Ramon Ferré, y de Cunit, Jaume Casañas, han vuelto a reiterar a la Generalitat la necesidad de que la C-31, que atraviesa por los núcleos de ambas localidades, pase a ser una avenida urbana integrada a un entorno urbano y que no tenga un aspecto de carretera.
Los alcaldes expusieron la demanda al secretario de Territori, Ricard Font. Explicaron que siendo una vía urbana podrán habilitarse aceras más anchas y carriles bici.
Sin embargo para que la propuesta sea una realidad es necesario reducir la circulación por la C-31 y se vuelve a pedir que la autopista C-32 sea gratuita en la zona del Penedès para que sea una ronda litoral
Años de peticiones
La demanda no es nueva y hasta ahora no se ha logrado pese a años de peticiones. Sin embargo, desde el Ayuntamiento de Calafell aseguran que la Generalitat se ha comprometido a anunciar decisiones próximamente. Aunque no se ha precisado de qué decisiones se trata.
Ahora la C-31 está en obras en Cunit. En el municipio el Ayuntamiento ha pedido incorporar al proyecto una rotonda en en el cruce con la Carrerada Santa Coloma que debe mejorar el acceso al núcleo histórico y que no estaba contemplada en el proyecto inicial.