Juzgado por disparar a bocajarro a una persona en un bar de Cambrils tras una discusión

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La Audiencia de Tarragona juzgará este viernes a un hombre de 32 años acusado de un delito de asesinato en grado de tentativa, uno de lesiones con uso de arma de fuego y otro de tenencia ilícita de armas modificadas.

Los hechos pasaron el 10 de julio del 2020 en un bar de la avenida Vilafortuny de Cambrils. Según el escrito de acusación de la Fiscalía, F.P.P. habría discutido con un cliente del establecimiento, habría ido a su vehículo para coger una pistola y le habría disparado tres veces por la espalda a bocajarro.

Además, habría disparado "indiscriminadamente el arma en el interior del local" y uno de los tiros habría impactado en la pierna de un segundo cliente. La Fiscalía le reclama quince años de prisión y ocho de libertad vigilada.

Tal como detalla el escrito de Fiscalía, hacia la una y media de la madrugada, F.P.P. habría mantenido una conversación con una de las víctimas y habría dicho: "este no sabe quién soy, voy a buscar la sin plomo". Después de esto fue al vehículo y cogió un revólver, para el cual no tenía licencia y que además estaba prohibido porque estaba modificado.

Al volver a entrar al local, se acercó a su interlocutor por la espalda y "con la intención de acabar con su vida y con la conciencia del riesgo que implicaba" sacó el arma de fuego "y disparó a bocajarro", sin que la víctima pudiera "prevenir el ataque ni defenderse".

Posteriormente, "con el ánimo de atentar contra la integridad física ajena, disparó indiscriminadamente el arma en el interior del establecimiento, y uno de los proyectiles impactó en la pierna" de otro hombre. Desde el día siguiente de los hechos, F.P.P. está en la prisión sin fianza.

La Fiscalía también apunta que F.P.P. presentaba "una alteración psíquica como consecuencia de dependencia politóxica y trastorno intelectual leve", hechos que alteraban "levemente" sus capacidades. Como consecuencia de los hechos, la primera víctima sufrió heridas graves en zonas de riesgo vital y tuvo que estar cinco días en la UCI y dieciséis más en el hospital. La segunda, que sufrió un disparo en la pierna, estuvo hospitalizada cinco días.

Así, por el delito de asesinato en grado de tentativa el ministerio fiscal pide diez años de prisión e inhabilitación para ejercer el derecho de sufragio pasivo, ocho años de libertad vigilada y la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de las dos víctimas por un periodo de ocho años superior a la pena de prisión que se imponga.

Además, por el delito de lesiones con uso de arma de fuego le reclama tres años de prisión e inhabilitación para ejercer el derecho de sufragio pasivo.

Finalmente, por el delito de tenencia ilícita de armas le pide dos años de prisión e inhabilitación para ejercer el derecho de sufragio pasivo más.

A la vez, en concepto de responsabilidad civil, la Fiscalía considera que tendría que indemnizar con 16.275 euros a la primera víctima; y con 9.415 euros, a la segunda.