La sala de espectáculos para adultos Bagdad de Barcelona quiere tener su espacio en BCN World, si finalmente el proyecto se acaba materializando. La propietaria del local, Juani De Lucía, considera que «encaja a la perfección» con el modelo de turismo y ocio que fomentaría el macrocomplejo. Asegura que la idea les interesó desde el minuto uno. Incluso intercambiaron varios correos con Veremonte antes de que diera marcha atrás. «Les mandamos un e-mail manifestando cuál era nuestra intención. Nos dijeron que les parecía buena idea. Y que cuando estuviera todo más avanzado nos avisarían. Pero ahora estamos como estamos», lamentan.
«Llevamos más de cuarenta años viviendo en Salou, y allí todo el mundo está pendiente del futuro de esta inversión», apunta De Lucía, señalando que le gustaría poder ampliar su negocio cerca de casa. Hace años tuvieron un local en La Pineda. Se llamaba El Faraón. «Pero eran otros tiempos y no había mercado», recuerda la propietaria de la sala de espectáculos pornográficos de Barcelona, que cuenta ya con una trayectoria de más de cuatro décadas. Con BCN World ven una gran oportunidad. «Es una zona inmensa con muchas posibilidades, y tenemos los ojos puestos allí desde hace tiempo», insiste De Lucía.
Pero la situación política, marcada por las negociaciones entre Junts pel Sí y la CUP, tiene bloqueado el proyecto. Su continuidad no está, para nada, garantizada y la paralización tiene en vilo a sus posibles inversores. «A ver si los políticos se ponen de acuerdo. Crearía muchos puestos de trabajo, generaría turismo, habría comercio de calidad, casinos, hoteles... Sería bueno para la zona, porque generaría riqueza, consumo y muchísimos puestos de trabajo», apunta De Lucía.
Su intención es regresar a la Costa Daurada con su Bagdad más consolidado que nunca y con cuarenta años de experiencia a sus espaldas. «La madre sería la sala de Barcelona, pero esta sería superior, con un local más grande y espectáculos muy bonitos. Para ello debería desencallarse», insiste la propietaria del Bagdad, quien considera que ahora sería un buen momento para impulsar la inversión.
«En los solares donde se prevé la construcción no hay nada, y de esta manera habría actividad, riqueza y atraería a visitantes de países como China, Rusia y con un elevado poder adquisitivo», insisten tanto Juani De Lucía como su marido Rafael, quien señala que «ahora en aquellos terrenos solo hay ratas y mosquitos». También lamenta que el tema del juego genere tanto debate y cree que su proyecto sería un buen complemento: «Hay apuestas deportivas, quinielas, hay juego por todas partes. Estamos infectados de loterías y apuestas, y ahora dicen que un casino quiere destrozar la moral de la gente».
Hoy por hoy no tienen interlocutor. Todo está pendiente de la política, y desde que Veremonte abandonó el proyecto no saben a quién dirigirse. «Ya toca que se desencalle. Lleva mucho tiempo así y la zona lo pide. Debería reactivarse», insisten los propietarios del Bagdad. De momento se mantienen a la espera de conocer el futuro de BCN World. Pero se muestran y críticos con la clase política por frenar inversiones como ésta. El interés de la sala por el proyecto llega, según apunta La Vanguardia, después de que el Ayuntamiento de Madrid no le otorgara la licencia para abrir allí un segundo local.
