No es la primera vez y probablemente sea sino la última una de las últimas, pero cada vez que los gemelos Oriol, Joan y Edu, se citan sobre el césped es un acontecimiento familiar. Lo fue en 2008/2009 cuando se enfrentaron por primera vez en la Ciutat Esportiva del Villarreal. Joan lucía la zamarra amarilla y Edu la del Sant Andreu. Después de años compartiendo vestuario en la desaparecida Escola de Veterans de Cambrils, en la Pobla y en el Reus volvían a encararse. Como tantas veces habían hecho en casa. En esos uno contra uno que acababan con los hermanos enfadados entre ellos. «Teníamos que buscar otros dos amigos para hacer dos contra dos y así jugar juntos», cuenta Edu. Ese primer duelo acabó con triunfo de Joan, aunque en la vuelta, en el Narcís Sala de Sant Andreu, Edu le devolvió la victoria.
Esa rivalidad sana entre gemelos fue la que les inspiró para llegar a la élite. «Creo que la competitividad que teníamos nos ayudó a crecer tanto como para llegar a ser profesionales». Los dos llegaron a Primera y Segunda, donde se repitió el duelo fratricidad. Era la 2015-16 y entonces Edu ofrecía sus servicios al Llagostera y Joan al Mallorca. Un año antes ambos coincidieron en la categoría pero no llegaron a medirse en el verde. Ese duelo entre azulgranas y bermellones se lo apuntó Edu, que entró en la segunda mitad, con claridad (3-0).
«Jugar contra Joan es difícil porque con lo ojos cerrados sé dónde puede estar y lo que va a hacer con el balón»Entre medio de esos duelos, Joan y Edu corrieron aventuras juntos. En la Championship inglesa con el Blackpool y en el Rapid Bucarest de Rumanía. Fue efímero pero los gemelos volvían a compartir vestuario. Tras aquello sus carreras se volverían a separar.Edu Oriol
¿Qué es más difícil: compartir vestuario o enfrentarse? Edu lo tiene claro: «Enfrentarnos». Se dice que los gemelos suelen tener una conexión mucho más fuerte que los hermanos nacidos en diferentes embarazos. Haya o no datos científicos que lo respalden, Edu asume perfectamente que en el campo «siempre sé lo que va a hacer mi hermano».
«Edu es el mejor lateral de la categoría»Esa lectura anticipada compartida hace que los duelos sean realmente interesantes por el efecto espejo. Tiene pinta de que el domingo habrá enfrentamiento y que todo ese conocimiento que se tienen se pondrá a prueba. «Tendré que ir con cuidado porque sé que puede ir por dentro y por fuera por su pasado como delantero y extremo. Ha ido retrocediendo su posición con el paso de los años pero tanto tiempo en la élite le queda esa capacidad tanto de centrar como de encarar que le han convertido en un jugador muy profundo y para mí, y así lo dicen los números, es el mejor lateral de la categoría», decía Joan que destaca el buen momento por el que atraviesa Edu con 35 años como uno de los jugadores clave del Sanluqueño.
Joan Oriol
Esta temporada ya se han visto las caras en el Sanluqueño-Nàstic de la primera vuelta (0-0). Un duelo igualado en el que Joan y Edu lucieron el brazalete de capitán de sus respectivos equipos. Una foto familiar para enmarcar. Entonces Edu Oriol ejerció de anfitrión. Lleva cuatro años en Sanlúcar, donde ha establecido vínculas familiares que hacen que esté ligado a Cádiz. «Siempre quieres estar en equipos con más entidad o que cobres más, pero aquí soy feliz», dice. El extremo admite que volver a Tarragona le hace especial ilusión: «Siempre es emotivo jugar en el Nou Estadi por la proximidad de la familia y los amigos y si encima juega en el Nàstic mi hermano gemelo pues es un orgullo».
Para Joan jugar con su hermano «es una motivación y más sabiendo que puede ser de los últimos». Como no puede ser de otra manera el Oriol ‘grana’ no le desea suerte este fin de semana porque «quiero ganar para meternos en play-off», pero después espera «que se salven, tanto por mi hermano como por el club al que tengo mucha simpatía».
