La fiesta y el baile, fuentes de energía

29 abril 2024 19:47 | Actualizado a 30 abril 2024 07:00
Álex Saldaña
Comparte en:

Este país nuestro tan juerguista y dado a la rumba quizá no lo sepa, pero tiene un filón en esto de las nuevas formas de producir energía. Y no me refiero al sol o al viento, que también, sino a una fuente de energía mucho más divertida: la fiesta, esa que tan bien se nos da.

Sí, tal cual lo leen. Al ritmo que la jarana marque, el club multidisciplinar nocturno SWG3 de la ciudad escocesa de Glasgow ha logrado capturar el calor corporal de sus devotos a la música y el disfrute y lo utiliza como fuente de energía para climatizar sus distintas salas con un sistema innovador de carbono cero.

El DJ hace sonar su repertorio y poco a poco las personas se reúnen en torno al pinchadiscos hasta llenar el lugar, bailando al ritmo que les marque –solo espero que no sea reguetón–: entonces la temperatura sube... y capturan ese calor para enviarlo a una sala de máquinas y de ésta al subsuelo, donde se almacena en doce pozos y se envía de vuelta a la superficie cuando se necesita mediante un líquido portador químico no tóxico resultante de la reacción del agua con óxido de etileno, de la familia del glicol.

«Es capaz de evitar su congelación durante los meses de invierno, y es eficiente a la hora de transportar el calor a lo largo de 2,5 kilómetros de tuberías» a 200 metros bajo el suelo, para luego hacer el camino contrario y dar tanto calor como frío, explica el ingeniero Emmet Strachan de TownRock Energy, la empresa encargada de instalar el sistema.

O sea, que se trata de aprovechar el llamado calor humano como fuente de energía. No está mal. Ya les digo yo que en los bares de mi pueblo los fines de semana se podría conseguir energía para todo el año. A bailar, pues, que, además de producir energía, es una actividad bien saludable.

Comentarios
Multimedia Diari