Las Muntanyes de Prades y Serra de Montsant son la zona de cielo oscuro protegido más grande de Europa. «Más de 700 kilómetros cuadrados», puntualiza Aleix Roig, astrofotógrafo y guía astronómico del Parc Astronòmic de les Muntanyes de Prades. Toda un área que cuenta con la certificación, por Generalitat, de Espacio de Medio Nocturno Protegido y, por parte de la Fundación Starlight, de Destino Turístico Starlight. Haber llegado hasta aquí es gracias a la implicación de varios agentes, desde el Parc Natural de Montsant, al propio Parc Astronòmic de les Muntanyes de Prades, además de Generalitat, Diputació y un total de 32 municipios, principalmente del Priorat, pero también pueblos del Baix Camp, Alt Camp y Conca de Barberà ubicados en el área de Prades.
Todos ellos están comprometidos en la preservación del cielo nocturno –algunos también en la mejora acústica– y en los últimos años han empezado a implementar medidas. La primera de ellas: la reducción de la intensidad y cambio de color del alumbrado público, apostando por una luz más cálida. Un punto esencial para alcanzar un cielo nocturno de calidad. Según Aleix Roig éste se define por la oscuridad del cielo, la transparencia, la nubosidad y la estabilidad de la atmósfera y de imagen, unos parámetros que se miden con aparatos específicos y estadísticas.
«Conseguir un cielo de calidad es importante, en primer lugar, por una cuestión de salud, de calidad de vida», subraya Roig, dejando en un segundo plano el interés astronómico que de aquí también se desprende.
Falset es uno de estos 32 municipios implicados. El alcalde, Carlos Brull, cuenta que ya han cambiado 272 luminarias a través de tres fases, es decir, han sustituido el alumbrado por tecnología led de luz cálida menos intensa. También han incorporado una parte del alumbrado con un regulador que a media noche reduce la intensidad al 50%.
De momento, el municipio lleva invertidos cerca de 42.000 euros. «Ahora quedaría una tercera parte», puntualiza Brull. Para este año, la previsión es llevar a cabo la cuarta fase, centrada básicamente en el casco antiguo, y una vez finalizados estos trabajos, «quedarán zonas puntuales, como el polígono o alguna salida», señala el alcalde de Falset.
El municipio se adherió en 2021 a esta iniciativa que, como recuerda Brull, «es, además, una decisión de comarca». El objetivo es la sostenibilidad, «y también una cuestión de consumo energético y de ahorro económico», subraya el alcalde, que recuerda que el municipio ya hacía años que avanzaba en este sentido.
Aunque el cambio de alumbrado es de las acciones más efectivas para conseguir un cielo nocturno de calidad, ésta no es la única medida que se está llevando a cabo en el territorio. El proyecto cuenta con un plan específico de medidas, aprobado en 2018, cuando el Parc Natural de Montsant, conjuntamente con los municipios de su entorno, obtuvieron el distintivo de calidad ambiental de la Generalitat.
Según el documento de seguimiento elaborado por el Departament d’Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural de la Generalitat de Catalunya, se han empezado a incorporar criterios de prevención de contaminación lumínica en edificios, monumentos i equipamientos municipales y del Parc, criterios que también se exigen ante la autorización de nuevas actividades.
Los agentes implicados también han hecho divulgación, con la señalización de la zona protegida, a través de charlas y actividades de sensibilización y también campañas específicas en las escuelas de los municipios implicados. Por otro lado, el mismo documento indica que hay medidas pendientes, como la adecuación de las instalaciones de iluminación exterior privadas.
A nivel acústico, doce municipios están adheridos. Y es que cabe recordar que en 2018, el Parc Natural de Montsant, conjuntamente con los municipios de su entorno, obtuvieron el distintivo de calidad ambiental que le acredita como el único territorio con doble protección de calidad lumínica y acústica. Sobre ruidos, el documento de seguimiento del plan indica que se han aplicado restricciones de vehículos motorizados en el Parc Natural de Montsant, con control de acceso al tráfico. Habría 682 autorizaciones otorgadas. También han sido limitados los actos multitudinarios ruidosos. Lo que todavía queda pendiente es realizar una evaluación de la calidad acústica.
El Parc Astronòmic, clave
El Parc Astronòmic de les Muntanyes de Prades ha jugado un papel clave, y sigue haciéndolo, en este camino hacia la calidad de cielo nocturno. Como recuerda Aleix Roig desde el parque, en 2018, cuando el Parc Natural de Monstant y entorno empezó las primeras andaduras, el Parc Astronòmic se volcó, junto al Ayuntamiento de Prades, para hacer el proyecto extensible a la zona de las Muntanyes de Prades. «Entre 2018 y 2021 trabajamos intensamente con Generalitat, Diputació, el territorio...», recuerda Roig. Hasta que en 2021, definitivamente, la extensión se hizo efectiva.
Ahora, no se puede bajar la guardia. Y es que hay que certificar que la calidad se mantiene con auditorías en profundidad cada cuatro años.
