Susto mayúsculo el que se llevaron la madrugada de este lunes los vecinos del número 20 de la calle Menorca de Tarragona. Un total de 39 fueron desalojados por los Mossos d’Esquadra por lo que, en principio, parecía ser una fuga de gas. Finalmente, se trató de una mala extracción y en un piso diferente al que inicialmente se pensaba.
La policía catalana alertó a Bombers de la Generalitat de un problema en el inmueble. Al llegar al lugar, los bomberos comprobaron como la policía estaba desalojando a todo el edificio. En principio, se habría producido un escape de gas en el 4º1ª. Inmediatamente, efectivos de Bombers se dirigieron al piso, pero no vieron nada extraño. Todo parecía indicar que el problema procedía de otra vivienda.
Tras las inspecciones pertinentes, los bomberos pudieron determinar que el problema procedía del 5º1ª, exactamente una altura superior al que inicialmente se pensaba. Y tampoco se había producido fuga de gas alguna. El problema real fue que tres personas estaban cocinando y que en el piso no había suficiente ventilación. Un problema con la campana extractora motivó que saltase la alarma y que tanto los Mossos como muchos de los vecinos pensasen realmente que se trataba de un problema con el gas.
Las tres personas que había dentro del piso cocinando fueron evacuadas al hospital Moisès Brogi, de Sant Joan Despí. Todos ellos acabaron intoxicados por inhalación de monóxido de carbono. Por otra parte, cuando se realizó la ventilación pertinente, el resto de vecinos pudieron regresar a sus casas sin más inconvenientes. En el servicio actuaron tres dotaciones de Bombers y varias ambulancias del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM), que atendieron a los tres intoxicados.
¿Por qué a Barcelona?
Habitualmente, a los heridos en accidentes domésticos o de tráfico en sucesos que tengan lugar en Tarragona, se les deriva a centros hospitalarios de la misma provincia. Pero hay algunas excepciones, como algunos de mucha gravedad que son trasladados al Hospital de Bellvitge o, como en el caso del suceso que nos ocupa, el de estos tres intoxicados.
Si no estaban graves, ¿por qué fueron trasladados a Barcelona? La respuesta es que, el Hospital de Sant Joan Despí, cuenta con una cámara hiperbárica que es perfecta para tratar este tipo de dolencias.