Operarios de una empresa de desatascos consiguieron rescatar el pasado fin de semana un cachorro de gato que había quedado atrapado durante todo un día en una cañería de Constantí (Tarragona), un caso que movilizó a múltiples voluntarios, según fuentes municipales.
El gato, que forma parte de una colonia controlada, cayó en una tubería abierta de la calle y quedó atrapado bajo tierra.
Sus maullidos de auxilio movilizaron primero a los vecinos y enseguida, a un extenso grupo de voluntarios, sobre todo de protectoras, que intentaron rescatarle.
Sin embargo, la tubería mide un metro de altura y está aplastada por uno de sus extremos, lo que frustró los intentos de los bomberos de rescatarle.
Gracias a la amplia difusión hecha por las redes sociales, un vecino de L'Arboç, municipio situado unos 50 kilómetros de distancia, aportó una cámara especial para situar al cachorro.
Finalmente, después de 24 horas de estar bajo tierra, técnicos de la empresa Desatascos Limpseur, autorizada por el ayuntamiento y con la calle cortada por la Policía Municipal, consiguieron rescatar al gato vivo, aunque exhausto.
La presidenta de una protectora que participó en el rescate, Eva María Rivas, explicó que "estaba desnutrido y con los ojos irritados a causa de la arena, pero nada importante".
Tras recibir el alta del veterinario, el gato recibió el nombre de Limpseur por parte de la Asociación Amantes de los Animales de Constantí (ADAC), que lo ha acogido temporalmente mientras espera que alguien lo adopte.
