La Guardia Civil seguía la pista del narcosubmarino varado

Autoridades estadounidenses y portuguesas tenían información de la ruta de la nave, que habría cruzado el Atántico con 3.000 kilos de cocaína valorada en 100 millones de euros

26 noviembre 2019 08:50 | Actualizado a 26 noviembre 2019 13:45
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Un submarino cargado con unos 3.000 kilos de cocaína de gran pureza, con un coste en el mercado de unos 100 millones de euros, quedó hundido el domingo en la playa de Hio, en el municipio pontevedrés de Cangas de Morrazo, y dos personas han sido detenidas. Se sospecha, a la espera de la declaración de estas dos personas nacionalidad ecuatoriana, que la embarcación habría cruzado el Atlántico en el primer viaje transoceánico con droga interceptado en Europa. Una distancia de 7.690 kilómetros en línea recta que sus tres tripulantes –se busca a un nacional español que eludió el control policial en tierra– habrían realizado en unos 20 días.

La Guardia Civil tenía información y esperaba en la costa a sus tripulantes. Éstos abandonaron el artefacto a nado con trajes de neopreno y maletas después de sufrir un problema con el motor y quedarse sin combustible.

Los dos ciudadanos ecuatorianos fueron detenidos, pero su compinche español llegó a la playa y se perdió por un monte anexo. Un operativo especial está en marcha desde entonces para dar con su paradero.

Las autoridades portuguesas y la DEA estadounidense conocían el periplo del narcosubmarino, que habría salido de la costa de algunos de estos países emisores de droga a Galicia en los últimos tiempos, dada la presión policial y militar en estados tradicionales como Colombia o Brasil. Se trata de Guyana, Suriman o La Guayana Francesa, fronterizos con Venezuela y Brasil, respectivamente. Desde allí habría llegado a Cabo Verde y luego subieron hasta Portugal. Ya a la altura de Lisboa se situaron a 40 millas de la costa para navegar en paralelo hasta Galicia.

La Policía Judicial lusa lo sabía y fue a por ellos, pero sin éxito. En Pontevedra, la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional recibió el viernes pasado una aviso: la embarcación estaba en aguas gallegas. Era el dato que necesitaban para completar la investigación abierta con anterioridad por el grupo especial contra el Crimen Organizado (ECO) de la Guardia Civil.

En el lugar donde quedó varado el semisumergible, a pocos metros de la costa en la zona de Punta Couso, está desplegada la patrullera Corvo Mariño para tratar de reflotar el batiscafo y concluir la aprehensión de la droga.

Comentarios
Multimedia Diari