Ocurrió en Jaén el pasado 20 de agosto. Un hombre de 70 años murió tras sufrir la rotura de una variz que le hizo desangrarse mientras esperaba a una ambulancia que lo trasladase a un hospital, a 50 metros de su vivienda. Su mujer llamó tres veces al servicio de emergencias porque no era la primera vez que le ocurría porque, según explica el Ideal de Jaén, sufría dolencias.
Inicialmente, su mujer intentó parar el sangrado de su marido pero, al ver que era imposible, llamó al 061, que no pudo enviar una ambulancia porque no tenía efectivos disponibles. Volvió a alertar al servicio de emergencias dos veces más, hasta que consiguió que enviaran el vehículo pero solamente con el conductor —sin el equipo médico— que, al comprobar la gravedad de la situación, pidió más efectivos.
Tras ser trasladado al hospital e ingresar en la UCI, nada se pudo hacer por salvarle la vida: murió esa misma noche. Desde el Servicio Andaluz de la Salud no han confirmado todavía su versión ya que, aseguran, están estudiando el caso.