Ciclistas versus peatones

Mientras los ediles – viejos y nuevos – discuten si va a haber los mismos o menores puestos “de confianza”, es decir, de enchufes adecuados, por las calles y paseos de Reus seguimos con la lucha diaria a ver quien se lo lleva: si los ciclistas acaban de invadir las aceras o si los peatones se rebelan y les echan a la calzada, por donde tienen que ir.

Mientras nuestros queridos y votados ediles discuten cuánto se van a llevar, los ciudadanos de a pie hacen porras a ver si el día acaba o no con algún atropello en cualquier acera o paseo de la ciudad.

¿Exageraciones?... Mire, lector, por si es ciego, no sale de casa, o solo va en coche, como nuestra Guardia Urbana: hay ciclistas cada día por lugares en que hay una señal evidente de prohibido que circulen. No vamos lejos: en la calle Llovera he visto a una joven, de aspecto europeo, subir en bici en dirección ascendente, meterse en Prat de la Riba por la acera de la izquierda (sentido contrario), sorteando peatones. Tan fresca. Por el paseo deSunyer y el de Prim es frecuente ver no uno, sino dos o varios muchachos (de aspecto magrebí) haciendo carreras o sencillamente jugando a no atropellar a nadie. Estos paseos están frecuentados por ancianos y niños. Desconozco si ha habido sucesos lamentables o no, pero el peligro está latente.

Seños ediles, señor Alcalde: la bicicleta es un vehículo. De estabilidad mínima. Es peligroso para el conductor y para los peatones, sobre todo para los más desvalidos, por edad o disfunción.

Todo vehículo debe ir por la calzada, excepto los de inválidos. El hecho de que no haya carriles bici no es excusa para cumplir la ordenanza municipal.

¿No la saben?...

Pues vamos a “celebrar” el añito de su vigencia.

La de civismo dice cosas tan bonitas (artículo 1) como “la finalitat es el manteniment d´un clima de civisme, convivència social i respecte mutu que fomenti les relacions solidàries, tolerants i respectuoses entre els ciutadans…”.Y añade (artículo 6.2) “ningú no pot menyscabar els drets de les altres persones” y (6.6) “totes les persones que es troben a Reus tenen el deure de col·laborar amb les autoritats municipals o amb els seus agents en l´erradicació de les conductes…” para que (artículo 7.2) “la ciutat sigui més amable y acollidora…” ya que (artículo 1º.1) ”…La ciutadania haurà de respectar la convivència i la tranquil·litat ciudatadanes, tot observant el degut civisme i evitant perjudicar els drets... de la resta de persones.”

Por ello (artículo 34, f) “és prohibit circular en bicicleta, patins, monopatins i similars per les voreres o per altres espais destinats al ús dels vianants”.

Yo, simple ciudadano, ¿debo enfrentarme a los incívicos o descerebrados que no obedecen?...Claro que no. Por ello el artículo 36 de la Ordenanza dice que “la Guàrdia Urbana és l´encarregada de vetllar pel compliment de aquesta ordenança”…

Si el Ayuntamiento quiere mejorar la calida de vida, debe actuar ya, de forma consistente, para aplicar lo que todos esperamos y que llevamos un año de vigencia, sin resultados visibles.