Todo el mundo sabe diferenciar a los turistas de los inmigrantes. Los turistas son aves de paso. Unos 80 millones transitan cada año a España (18 millones por Catalunya). Vienen a vernos y se van.
En cambio el inmigrante –según definición de diccionario- “es la persona que llega para establecerse aquí, temporal o definitivamente; para hacer vida, estudiar, trabajar, etc».
En toda Europa hay gente con mucha prevención contra los inmigrantes que vienen en busca de un trabajo o para mejorar el que ya tenían en sus países de origen. Pero no a todos se les suele llamar inmigrantes.
A modo de ejemplo, citaré algunos que quizá le suenen: Messi, Griezmann, De Jong, Suárez, Rakitic, Untiti, Melo, Ter Stegen, Semedo, Ansu Fati…