Tras 18 días de búsqueda, la policía australiana encontró sana y salva a Cleo Smith, una niña de cuatro años secuestrada en un camping. Dormía con sus padres y una hermanita. A las 6 sus padres advirtieron que no estaba.
No apareció por los alrededores. ¿Dónde buscarla? Se imprimieron 50.000 carteles con el rostro de la menor, se alertaron a las redes sociales y se ofreció un millón de dólares a quien diera una pista fiable. Hubo más de mil llamadas, pero Australia es el sexto país más grande del mundo (15 veces España).
Al fin apareció en una casa a cien kilómetros. Su raptor no estaba en aquel momento. El policía que la halló le preguntó cómo se llamaba, y la niña contestó tranquila: «Me llamo Cleo». ¡Lo que es la inocencia! Todo el mundo preocupado menos ella.