El año electoral como oportunidad

Queridos lectores, antes de nada ¡feliz año! Empezaba a escribir estas líneas, anteayer por la mañana, tras la noche más mágica del año, especialmente cuando tienes algún pequeño en casa. Y al hacerlo pensaba en cuál sería mi carta a los Reyes si les pudiera pedir lo que deseo para el Camp de Tarragona y Terres de l’Ebre.

Comenzaría así: ya que será un año electoral, con elecciones municipales y generales, pediría a nuestros represantetes políticos menos ruido y confrontación gratuita, y más crítica constructiva y propuestas de valor para mejorar y avanzar en ámbitos cruciales como la salud y la educación. Madrid vive una huelga médica desde hace semanas y en Catalunya, hay convocados paros en ambos servicios públicos, el 25 y 26 de enero.

También les recomendaría que leyesen la entrevista de la periodista del Diari, Maria Victòria Bertran a Francesc Roig, presidente de Caritas Catalunya, que publicamos hoy. Roig nos alerta de que dos de cada seis familias catalanas están en situación de pobreza severa y que, cada vez, atienden a más personas que no hubieran imaginado antes.

A los alcaldes que salgan de las elecciones del 28 de mayo, les rogaría que además de pensar en los vecinos de sus municipios, trabajaran conjuntamente para consolidar Tarragona como la seguna área económica y metropolitana de Catalunya. Tenemos los activos para lograrlo.

El mayor polo petroquímico del sur de Europa. El quinto puerto del Estado, líder en productos agroalimentarios en el Mediterráneo, y que su nuevo presidente, Saül Garreta, quiere que sea un referente de la sostenibilidad y la descarbonización, como desvela a Núria Riu en la sección de Tarragona de hoy. Un sector turístico que genera más del 20% de la actividad en Catalunya. Un tejido empresarial rico y diversificado con numerosas compañías punteras en diferentes ámbitos de actividad y motores de empleo en sus respectivas comarcas, que conviven con firmas de larga tradición e historia en nuestro territorio, y que deben seguir trabajando en la innovación, la internacionalización o la digitalización.

Pero también tenemos retos y, entre todos, debemos exigir a nuestros mandatarios el liderazgo y el esfuerzo necesario para situar al Camp de Tarragona y las Terres de l’Ebre en el lugar que merecen. El año electoral es una oportunidad en este sentido.

Sabemos que no será fácil. Vivimos tiempos inciertos. Es cierto. Pero tenemos instituciones como las cámaras de comercio, el Círcol de Reus, el Centre de Lectura, por citar algunos ejemplos, que en sus más de cien años de historia han visto situaciones de todos los colores y han salido adelante.

Gemma Ventura, Premi Josep Pla

De momento, sus majestades de Oriente no se han portado mal. El segundo premio de la Lotería del Niño ha repartido suerte en Reus, Bellvei, L’Hospitalet de l’Infant y Horta de Sant Joan, y la escritora vendrellense Gemma Ventura Farré ha ganado el 55º Premi Josep Pla (el galardón literario más antiguo de España), con su primera novela, La llei de l’hivern.

Se trata de un buen debut, tras dejar atrás el Any Ferrater y adentrarnos en el año que el Ayuntamiento de Reus anunció que dedicará al escritor Xavier Amorós, fallecido el pasado julio, y que este 2023 hubiera cumplido cien años. El periodista, presentador del programa Més 324 y colaborador de la Contra del Diari, Xavier Graset, ya le rindió su particular homenaje el pasado 23 de diciembre cuando, como ya es tradición, subido a una silla, nos felicitó a todos las fiestas con el poema Nadal del poeta.

Transparencia y comunicación
de crisis

El año se ha estrenado con una polémica sobre la que vale la pena reflexionar. A punto de cumplirse tres años de la explosión de Iqoxe y de que se presente el libro que los periodistas Rafa Marrasé y Toni Orensanz han escrito sobre la misma, los alcaldes de La Pobla de Mafumet y El Morell, Joan Maria Sardà y Eloi Calbet, han pedido esta semana que el Twitter de Protecció Civil se utilice solo en situaciones de emergencia.

El debate sobre la estrategia comunicativa de Protecció Civil tiene su origen a finales de septiembre, cuando la ciudad de Tarragona registró un destacado episodio de malos olores. Muchos tarraconenses llamaron preocupados a los teléfonos de emergencias hasta que Protecció Civil informó de una fuga de nafta en una empresa del polígono sur del polo petroquímico.

A partir de entonces, y a petición de algunos ayuntamientos, Protecció Civil decidió comunicar e informar de cualquier incidente que tenga lugar en las empresas químicas a través de las redes sociales: desde actuaciones programadas y, por tanto, controladas, a sucesos con afectación sobre la población.

La controversia no es menor. Como ha quedado demostrado en algunos episodios de crisis, la comunicación no ha sido todo lo efectiva y eficaz que debería, pero tomar decisiones en caliente sin una verdadera autocrítica de lo que ha fallado para solucionarlo la próxima vez, no es la mejor manera de avanzar.

Conocer las mejores prácticas en esta materia y escuchar a los expertos en esta materia sí puede ser una vía para mejorar en un aspecto tan relevante.