Whatsapp Diari de Tarragona
  • Para seguir toda la actualidad desde Tarragona, únete al Diari
    Diari
    Comercial
    Nota Legal
    • Síguenos en:

    El carisma de Marías

    21 septiembre 2022 07:00 | Actualizado a 21 septiembre 2022 07:00
    César Muñoz Guerrero
    Participa:
    Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
    Comparte en:

    Lo primero que hice nada más enterarme de la muerte de Javier Marías fue coger el libro suyo que tenía más a mano, que en este caso era Corazón tan blanco, y leer su primer capítulo. Me di cuenta de que su estilo serpenteante, elíptico, semejante a un laberinto o a las ondas concéntricas que se expanden al tirar una piedra en el agua, era en efecto algo difícil de localizar en otros muchos escritores vivos del panorama hispanohablante. A decir verdad, desde hace bastante tiempo no era este el territorio donde competían sus novelas.

    He leído todo lo que se ha publicado estos días sobre Marías en cualquier periódico o revista, y hay ciertas cosas que creo oportuno recordar. La primera es el plano en el que se movía. Esto lo alejaba de conferencias y demás apariciones mediáticas, que en principio corresponderían a las funciones del que se ve empujado a introducir o mantener la presencia de su obra en sociedad.

    Él se expresaba a través de sus libros y su columna en el suplemento semanal de El País. Fue llamativo que en los últimos años declarase su intención de conceder cada vez menos entrevistas o que hiciese poco caso a las impertinencias que contra su voz libre ladraban algunos intransigentes. Los comportamientos de Marías iban contra la imagen de catacaldos que suele arrogarse a los artistas, pero por otro lado favorecían el tiempo y el esmero que dedicaba a su creación, que al final es la que asienta el prestigio de un literato.

    Los comportamientos de Marías iban contra la imagen de catacaldos que suele arrogarse a los artistas, pero por otro lado favorecían el tiempo y el esmero que dedicaba a su creación

    Por eso tiene todo el sentido del mundo pasar página, nunca mejor dicho, y dejar de lado consideraciones sobre el merecimiento del Nobel. La decisión de salirse de los tópicos la tomaron, por ejemplo, en la tertulia radiofónica ‘Cowboys de medianoche’, que trata sobre cine (?) y en cuya emisión del pasado viernes, como no podía ser de otra manera, se cantaron las alabanzas de la muy cinematográfica primera novela de Javier Marías, Los dominios del lobo, así como de su recopilación de artículos Salvajes y sentimentales, sobre el fútbol que tanto amaba. Idéntica actitud he visto en el dramaturgo Vicente Molina Foix, que en su obituario en El País honró a la vieja amistad que tuvieron.

    El último aspecto que reseñaré, y por ello también el que me parece más importante, es la reacción concreta al suceso por parte del público femenino. Mientras la mayoría de comentaristas (de la que excluyo a los ya mencionados) se han volcado en la grandilocuencia, ellas lo han despedido con silencio y discreción. El mayor grado de elegancia lo he visto en sendos textos de la periodista Ana Abelenda, aparecidos en el suplemento cultural ‘Fugas’ de La Voz de Galicia, en los que sin salirse de los testimonios que pide sobre el novelista a diversas figuras editoriales desliza la adhesión particular que sintió hacia el autor y su obra. Un gesto de buen gusto que no se queda en guiño privado, sino que alcanza a quienes sepan descodificarlo. Ese carisma que han destacado las mujeres, que sentían que escribía para ellas, es el rasgo definitivo que sitúa a Marías en otra galaxia de la escritura.

    Comentarios
    Multimedia Diari