Un lugar donde tomar algo, leer, relajarse y en el que también hay gatos. Es el concepto que siguen los cat cafés, cafés de gatos. El primero del Camp de Tarragona se inaugurará en Reus, en la calle Jesús, en septiembre. Se llamará Racó del Gat. Su impulsora, Patricia Catania, explica que «es una idea que surgió en Japón y se ha ido expandiendo por Europa». En su caso, el establecimiento tiene una vertiente solidaria: «Los gatos vendrán de protectoras de la zona y serán adoptables».
El Racó del Gat abrirá de 10 a 21h., en horario comercial. Para entrar será necesario reservar, con el objetivo de «controlar el aforo para preservar el bienestar de los animales y que no se estresen». El tique costará 10 euros, permitirá estancias de alrededor de una hora e incluirá una consumición preparada y sin alcohol, del tipo refresco o café. De momento, se pueden solicitar por Instagram (@elracodelgat_reus) aunque muy pronto se habilitará una aplicación.
Dentro habrá cuatro gatos que busquen familia y también una gata residente, Arizona, que fue adoptada por Patricia y va a estar allí «como anfitriona». El local, «pionero en el Camp», tendrá un timbre para pasar y habrá que lavarse las manos y ponerse unas pantuflas «porque los zapatos traen olores de la calle».
El espacio, que antes había albergado una sucursal bancaria, se dividirá en tres ambientes: una especie de jaima para sentarse, otra parte con algunas mesas de cafetería a una altura normal y otra de balancín. Respecto a los gatos, «hemos encargado elementos y mobiliario de pared a una empresa de Torredembarra que lo hará para ellos», comenta Patricia.
La propuesta se dirige a varios públicos. «Si te gustan los gatos pero no puedes tenerlos, esta es una manera de relacionarte con ellos. Y si quieres adoptar, aquí tienes la oportunidad de conocerlos y estar un tiempo con ellos para ver qué tal os lleváis, siempre respetándolos», explica la emprendedora. Además, «venir puede servir incluso como una terapia». En el Racó del Gat habrá proyecciones con información sobre los gatos y sobre sus cuidados. De momento, «tenemos a una protectora a la que ayudaremos a dar visibilidad y estamos hablando con otras que también quieran unirse».
Patricia, comunicadora audiovisual y periodista de 31 años, se ha lanzado a la puesta en marcha del cat café porque «me encantan los gatos, los amo desde que era pequeña y siempre se me han dado bastante bien». «De hecho, con cariño, a veces me llaman la loca de los gatos», bromea. El Racó del Gat se ubica en pleno eje comercial de Reus. «Queríamos que el sitio estuviese céntrico e instalarnos en una ciudad que fuese de residencia, y ahora hemos encontrado precios más asequibles», explica.
Para el estreno, el próximo 7 de septiembre, ya casi no quedan entradas y se espera que a lo largo de todo el día visiten a los gatos muchas personas, con un máximo de una decena cada hora. Patricia confía en que, además de vivir la experiencia, quienes pasen un rato en la cafetería acaben conociendo más el universo felino y, si quieren y cuentan con las condiciones necesarias para ello, hasta dando cobijo a alguno de los animales que estén esperando un hogar.
