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El municipio aragonés de Nonaspe será el punto de encuentro de centenares de motos procedentes de todo el territorio, también de Reus, entre el 8 y 10 de septiembre. Es desde la capital del Baix Camp que Motogrup Tragamilles organiza esta ya clásica concentración motera.
La presidenta del grupo motero reusense, Sasi Alarcón, recuerda que este hermanamiento entre Reus y Nonaspe se debe a Lourdes, la mujer del vicepresidente de la agrupación, Lluís Miquel Cortezón. «Ella es de Nonaspe y todo empezó con un desayuno en su municipio natal», explica Alarcón. De allí surgió la idea de realizar una concentración motera, y de los desayunos se ha apsado a un fin de semana repleto de actividades. El año pasado fueron 300 los participantes, y esta vez se espera mantener una cifra similar.
El fin de semana girará alrededor de la ermita de la Virgen de Dos Aguas, donde habrá acampada libre. La llegada de los participantes empezará el viernes 8 de septiembre a partir de las seis de la tarde y podrán acampar en los alrededores de la ermita. El sábado será la jornada más completa, con apertura e inscripciones a partir de las nueve de la mañana; a las 11.30 h, ruta, refrigerio y visita al museo etnológico y a la prisión de Nonaspe. Por la tarde, el programa seguirá con juegos moteros, una ruta, exhibición Country y chocolatada popular y terminará con cena, baile y música. La concentración finalizará el domingo, 10 de septiembre, con sorteos y un aperitivo de despedida. A las dos del mediodía, se dará el evento por finalizado. Participar todo el fin de semana tiene un coste de 40 euros, pero como explica la presidenta de Tragamilles, también hay la opción de participar solo un día a precio reducido. Una recaudación con fines sociales.
La concentración motera de Nonaspe hace años que se celebra, «hemos visto crecer a nuestros hijos», recuerda Alarcón. No obstante, ésta es la primera vez que el evento es organizado como Motogrup Tragamilles, un grupo motero que todavía no ha cumplido el año de vida, pero que ya cuenta con más de una cincuentena de socios.
No obstante, estos primeros meses ya han sido bien aprovechados. «Salimos a la Cabalgada de Reyes de Reus y en marzo hicimos un almuerzo», explica la presidenta. Tampoco les faltan ideas cara el futuro, «pero ahora nuestra prioridad es encontrar un local social», dice.
