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La tramitación del plan parcial 62, conocido popularmente como el sector Culubret, sigue adelante. Ayer la Comissió Informativa de Territori del Ayuntamiento de Tarragona daba cuenta del proyecto de reparcelación, que fue aprobado inicialmente el pasado 19 de octubre y que ahora está en fase de información pública, mientras sigue pendiente la resolución de las alegaciones y la aprobación definitiva del proyecto de urbanización.
Mientras esta fase administrativa sigue avanzando, el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya debe pronunciarse sobre dos recursos contenciosos-administrativos que podrían comportar cambios e incluso, en el peor de los casos para los promotores, obligar a suspender provisionalmente su ejecución hasta que estos no se resuelvan. Uno de estos lo habría presentado uno de los inquilinos, que se vería afectado por su ejecución. Mientras que el otro, cuestionaría el contenido del plan parcial, que en un primer momento formaba parte del tercer sexenio del POUM y que, tras modificarse la agenda del plan general, se avanzó y se incluyó dentro del primer sexenio.
De momento, estos recursos no obligan a paralizar la inversión. Así lo confirma el Ayuntamiento de Tarragona, quien afirma que «si desde el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya como medida cautelar no dicta una suspensión, seguiremos adelante con la tramitación». Una postura que también defienden los promotores de este sector. «No es una cuestión que nos preocupe porque, como es natural, las cosas se han hecho muy bien y así lo ha considerado tanto el Ayuntamiento como la Generalitat, que han dado su aprobación al plan», manifestaba Quim Culubret.
Culubret aseguraba que, a pesar de todo, el proyecto «no se para» y que este «sigue adelante». No obstante, los promotores podrían tener que retrasar un poco el inicio de las obras, que estaba previsto para el mes de enero. «La Covid está haciendo que todo sea mucho más lento y si ahora se ha abierto la fase de exposición pública, después tendremos que responder a las alegaciones, por lo que creemos que a principios de año aún no podremos tener la licencia», decía.
El plan parcial del sector Culubret afecta a la transformación de toda la zona situada entre Sant Pere i Sant Pau y la carretera de Santes Creus (TP-2031). En concreto, se trata de los terrenos situados después del cementerio, junto al camino conocido como del Llorito y también Viladegats. Actualmente están ocupados por un conglomerado de pequeñas naves de uso industrial donde están instaladas diversas firmas relacionadas con el sector de la construcción y reformas, además de algunas viviendas unifamiliares.
El ámbito comprende una superficie total de 27.379,13 metros cuadrados de los cuales 4.061 tendrán un uso residencial y 6.628 de carácter comercial. Esta última parte será la que se desarrollará en una primera fase. Supondrá la construcción de un edificio de cuatro plantas con un supermercado, 170 plazas de aparcamiento y una superficie habilitada para una docena de empresas especializadas del ámbito de la construcción.
Cuando finalice esta parte de la obra, se iniciará la segunda fase. Es la que hace referencia a la parte residencial y, según el proyecto de reparcelación, se prevé la construcción de entre 110 y 147 viviendas, de las cuales 22 ó 29 serán de protección oficial. La inversión prevista asciende a 15 millones de euros.
