Las calles de la Part Alta de la ciudad llenas de payasos, de ladrones con careta y mono rojo o de princesas de hielo durante la mañana de ayer, anunciaban que el carnaval había llegado y que empezaba con uno de sus actos más representativos, la Baixada del Pajaritu.
Faltaban unos minutos para que fueran las 11 de la mañana cuando la Plaça del Rei ya estaba ocupada por las más de quince andróminas que participaron en la 15a edición de este evento.
El recorrido que debían hacer ya estaba lleno de espectadores de todas las edades y de todos los personajes posibles. «Para mí es uno de los mejores actos de la ciudad y del carnaval», comentaba Núria, una fiel seguidora de la Baixada del Pajaritu. Por otro lado, personas como Anna vivían por primera vez este particular desfile. «Es algo diferente. Me ha gustado mucho, repetiré seguro», expresaba Anna.
Aunque, sin duda, la participación de una inesperada y diferente Mulassa ha conseguido la ovación de todo un público fascinado ante la recreación de uno de los elementos más representativos de Tarragona y también por el tamaño conseguido y es que superaba al de la original. «Es increíble el trabajo y la creatividad de los participantes. Cada año es una sorpresa», comentaba Eva, una pirata que aunque cada año cambie de personalidad, nunca falla a la Baixada del Pajaritu. Más allá de la reivindicación social, la originalidad y la diversión también han sido protagonistas y es que se ha podido ver desde una barbacoa en la que los ingredientes corrían detrás hasta el histórico juego del Comecocos.
Alguns dels premiats de la Baixada del Pajaritu! Quina imaginació i quina feinada, enhorabona ����#CarnavalTGN #castellers #castelleres pic.twitter.com/ZXp3CV3lXx
— Colla Jove de Tarragona (@JoveDeTarragona) February 22, 2020
Afortunadamente, la mayoría de andróminas no han tenido ningún problema y han podido repetir el recorrido desde la Plaça del Rei volviendo a escuchar aplausos a su llegada en el Cós del Bou. Después de casi dos horas, el ambiente festivo ha continuado con un vermut que se ha expandido por toda la Part Alta de la ciudad y es que las temperaturas primaverales y las ganas de carnaval han llenado todas las terrazas y activado un movimiento continuo de gente.
Así pues, la Baixada del Pajaritu se consolida, un año más, como uno de los actos más identificativos y multitudinarios del carnaval y en una buena forma de preparar el resto de la jornada.