Jordi Isern: Pintar el silencio

El artista paisajista alcoverense expone ‘El silenci dels paisatges’ hasta el día 19 en el Museu d'Alcover

09 octubre 2020 09:32 | Actualizado a 10 octubre 2020 07:53
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

«Los grises me encantan porque me gusta la lluvia, la nieve y el invierno. Sobre todo pintar el aire y la atmósfera, que siempre existe, excepto los días claros con viento. Quiero transmitir lo que siento: frío, paz, recogimiento al lado del fuego con un buen plato de escudella. En esta ocasión me llamó la atención el contraste de las pocas hojas anaranjadas, marrones y granatosas que quedaban en los avellanos, símbolo de nuestra tierra. Junto al gran protagonista del cuadro, el inmenso charco de agua donde se refleja el resto del contenido, el campanar de Alcover, la montaña o el cielo».

El pintor paisajista contemporáneo Jordi Isern describe de esta manera los sentimientos que le despierta la naturaleza cuando se dispone a atraparla en sus lienzos. En concreto, hace referencia a Hivern humit als nostres avellaners. Sin embargo, la esencia se puede hacer extensible a toda su obra, que habla de «serenidad, armonía, tranquilidad, bienestar y energía».

Jordi Isern Jubany inaugura el 9 de octubre El silenci dels paisatges, que se podrá visitar en el Museu d’Alcover hasta el próximo 19 de este mes, coincidiendo con la Fira y la Festa Major, que este año tendrá un formato reducido. Se trata de 37 piezas que plasman rincones de Alcover, y Montblanc, municipio este último donde el artista dispone de una galería desde hace 19 años en la que atiende al público. También el Pirineu, tanto de Lleida como de Girona y el Prepirineu. 

El 20 de octubre se sortea una obra original del artista entre los visitantes de la muestra

Así, a lo largo del recorrido el visitante podrá acercarse a los tejados de Surri (Lleida), a las viñas de Poblet, a una mañana en la Guingueta (el Pallars Sobirà, Lleida), a la Cerdanya o a Masca, en Tenerife. Y es que en esta edición Isern ha querido darle un protagonista un tanto mayor a su querida isla, donde cada dos años expone sus obras desde hace más de dos décadas. «Es otra casa para mí», revela el pintor nacido en Barcelona pero criado entre el Montseny y Alcover. «Me hacía ilusión darle un poco más de relevancia porque son piezas que aportan un cariz diferente y también hacen la muestra más amena. Por ejemplo, incluyo una marina, la única». Aguas salvajes y agresivas con lava volcánica de color oscuro. «Intento disfrutar del mar de allí y pintar el color del Atlántico». 

De igual manera, también cada dos años muestra sus nuevas creaciones en Alcover. «Hace 28 años que empecé mi carrera aquí. Y aunque he ido evolucionando y viajo y expongo en Asia, soy fiel a mis principios», señala. «Antes -continúa- en mis inicios, era una exposición más. Y ahora, con toda la modestia del mundo, ya es un acontecimiento que el pueblo agradece. Viene muchísima gente de fuera y yo me siento en casa. Por eso, en cuanto acabo una exposición empiezo a trabajar en la siguiente. Siempre con la misma temática, teniendo presente que cada obra es un momento y una historia».

En contra de lo que pudiera parecer, El silenci dels paisatges no es un título que tenga relación con la pandemia de la Covid-19, cuando se recuperó el canto de los pájaros, ahogado habitualmente entre el ruido cotidiano. «Lo que me inspira es la conexión con la naturaleza cuando estás rodeado por ella. El silencio habla, transmite», ¿Y qué es lo que comunica? «Bienestar», responde. Isern confiesa que con la llegada del confinamiento estuvo tentado de cambiarlo. «Pero después comprobé que era un título muy indicado por la situación política mundial, por los dirigentes que tenemos en general y, sobre todo, por el sosiego que necesitamos incluso de los medios de comunicación, que todo el tiempo hablan de desgracias... Y cuando pudimos salir de casa fuimos testigos de cómo todo el mundo se dirigió a los paisajes, hecho que todavía hoy dura, ya que no podemos hacer grandes viajes. Este silencio es el que necesitamos para conectar con nosotros mismos, para evadirnos de toda la invasión de inputs negativos que tenemos», sentencia.

La aventura japonesa
Es justamente a Japón donde por el momento no puede desplazarse, país en el que ya ha expuesto en nueve ocasiones desde 2012 y donde es recibido poco menos que como una estrella internacional entre largas colas, saludos y firmas de autógrafos. 

La última ocasión fue en diciembre pasado, en Nagoya. Ahora, la crisis sanitaria mundial ha obligado a cambiar la forma de colaborar. Mientras las exposiciones previstas se han aplazado a tiempos más propicios, sus mecenas, -la empresa más antigua del país nipón-, realizan encargos que Isern les hace llegar. Prueba del interés que profesan por los cuadros del alcoverense es el hecho de que tras recibir el catálogo de la exposición del Museu de Alcover, se mostraron interesados en comprar todo aquello que no se venda estos días.

El silenci dels paisatges se puede visitar de martes a viernes con cita previa. Sábados, domingos y festivos el autor estará presente. El horario es de 11 a 14 horas y de 17 a 21 horas. Información y reservas: www.museualcover.cat. Asimismo, el 20 de octubre tendrá lugar el sorteo de una obra original del artista entre todos los visitantes que se hayan acercado.

Comentarios
Multimedia Diari