El Tiempo
Estado Carreteras
Whatsapp
Encuesta
Directorio Empresas
Juegos
700 raciones de botifarra d’ou en menos de dos horas, degustaron ayer los presentes al mediodía durante el tradicional Carnaval Gastronómico.
Entre la gente que pasaba curiosa y los clientes desde hace años del Mercat Central, el que fue el lugar del evento, había niños y adultos, todos disfrutando de esta degustación del producto.
«Está muy buena, ¡excelente!», se oían los comentarios de satisfacción acompañados de una sonrisa.
Convertida desde hace diez años en una fiesta típica catalana, esta tradición tiene sus raíces en la época romana, contaron Sonia Castilla y Jordi Vinyoles, del Gremi dels Carnissers de la provincia.
Con vivacidad y bajo la música rítmica, ellos invitaban a los transeúntes que se amontonaban para probar las tapas ricas de butifarra de huevo«Con una copita de vino y una ración de estas, te calientas enseguida el cuerpo», aseguraban mientras las repartían. Como de costumbre, esta fiesta invernal está organizada por el Gremi dels Carnissers de Tarragona, junto con la Associació de Venedors del Mercat Central y la empresa municipal Espimsa.
La inauguraron la concejal de Comercio, Elvira Ferrando, y la directora del Mercat Central tarraconense, Mònica Garcia, quienes precisaron que este año las palabras clave son: «Fiesta, gastronomía, cultura y solidaridad».
El concepto es potenciar la gastronomía convirtiendo esta costumbre en una festividad gastro-cultural. Formando parte del conjunto del actual carnaval, su motivación es promover la cocina basada en la butifarra.
«Es el Carnaval de las tres erres», concretaron ambas, y añadieron que ahora era el momento para aprovechar y llevar al contenedor junto a la parada los disfraces que ya no usamos.
Roba Amiga dels centres cívics, el Mercat Central y la Botiga Amiga se comprometen a recogerlos, con la actual idea hoy en día, de «Reducir, Reciclar y Reutilizar», generando de esta manera puestos de trabajo para las personas con dificultadesY para que la alegría fuera completa, una receta sencilla para recordar los hábitos, sería la que propuso Jordi Vinyoles: «Para un plato rico, a la tortilla clásica se le añaden trozos de butifarra negra y blanca, también beicon».
Sonia Castilla, secretaria del Gremi dels Carnissers de aquí, dijo sonriendo que sea como sea: «con sal, con foie gras o castañas, acompañada por una copa de vino o sola», esta se ha convertido en el producto preferido, incluso por los extranjeros.
«A los ingleses les gusta mucho. Cuando la prueban, luego siempre repiten», contó ella. Lo que satisface al gremio local este año, es el hecho de tener a dos de sus charcuteros de ganadores en el concurso nacional de butifarra desde hace una semana.
«Es el tercer año consecutivo del concurso a nivel nacional», narró Sonia, y explicó que a los dos tarraconenses les eligieron entre los sesenta candidatos.
La fiesta no acaba, aseguraron de la Parada La Teca i La Meca de la Plaça en el Mercat Central. Aquí, cada mes, los amantes culinarios pueden gozar de varias degustaciones, demostraciones y campañas que sirven para promocionar este oficio.
Éxito de convocatoria en Reus
Un año más, la convocatoria del reparto de raciones de ‘botifarra d’ou’ en el Mercat Central de Reus fue todo un éxito.
A partir de las diez y media de la mañana, los paradistas del mercado empezaron a repartir este bocado tan típico del Dijous Gras, en este caso por gentileza de las charcuterías y tocinerías del Mercat Central.
A esa misma hora, en el Passeig Comercial el Pallol de Reus también tuvo lugar un encuentro grastonómico, que en este caso fue la degustación de un pincho de ‘llonganissa’ de Alforja.
