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«La situación vuelve a ser bastante complicada. Estamos a las puertas del verano, con la campaña de vacunación encima, y todo el brote que está afectando sobre todo a la atención primaria. También tenemos la carga de empezar a recuperar la actividad, pero a eso se añaden los cribados masivos», explica Gerard Mora, secretario del Col·legi Oficial d’Infermeres i Infermers de Tarragona (Codita). La entidad, en un grito de auxilio, ha hecho un llamamiento a la administración para la contratación de personal en un comunicado contundente. «La presión asistencial que está sufriendo la atención primaria es insostenible y nos hacen falta más manos. Por eso, entendemos que hay que contratar a más profesionales sanitarios, médicos y enfermeras, para reforzar la primaria, porque en esta quinta oleada nos faltan manos», denuncian.
«Al 200% de la capacidad»
«Estamos hablando de unos profesionales que llevan 16 meses dando el 200% de su capacidad. Y ahora, a las puertas de un descanso más que merecido, estamos en una nueva oleada, con una gran presión asistencial», lamentan. El quinto envite del virus no se está traduciendo por el momento en un incremento demasiado acentuado en los hospitales pero sí ha disparado el trabajo de diagnóstico en los CAP, sobre todo a la hora de hacer PCR y test de antígenos entre los jóvenes, el segmento de población que tiene unos índices de contagio desorbitados, prácticamente batiendo récords de toda la pandemia.
Desde el Col·legi, se alerta de que nuevamente se tendrán que reorganizar agendas, dejar a un lado las enfermedades crónicas y centrarse en esa atención a pacientes Covid y en la vacunación, que recae también sobre este colectivo. Los datos de Salut muestran el crecimiento exponencial. De los 107 casos positivos detectados por test de antígenos en la provincia, hace dos semanas, a los 1.400 actuales; por lo tanto, la cifra se ha multiplicado por 13, generando una sobrecarga que recae sobre todo en primaria.
Al mismo tiempo, la vacunación –por fortuna– discurre a buen ritmo, lo que significa que el trabajo de enfermería no cesa en ese ámbito. En lo que va del mes de julio, en Tarragona se han puesto según Salut unas 10.300 vacunas al día, una velocidad ideal que permite avanzar en los diferentes grupos de edad pero que exige mucho a los sanitarios, especialmente a enfermería.
«Hay que dar marcha atrás»
«Decisiones recientes por parte de Salut como no tener que hacer test a contactos de positivos con la doble pauta de vacunación y que no presentan síntomas pueden ayudar a descongestionar la presión del primer nivel asistencial, pero está claro que necesitamos más acciones», dicen desde el Col·legi. En ese sentido, Codita celebra la decisión del Govern de cerrar el ocio nocturno y cree que hay que dar marcha atrás y retomar algunas restricciones, como el uso obligatorio de la mascarilla en todos los espacios, tanto interiores como exteriores.
El ente colegial tarraconense anuncia que el número de contagios es tan alto que «seguro que en las próximas semanas vemos ingresos de gente joven en planta de hospitales y algunos en las UCI», por estadística: «Es cuestión de números. Como los contagios son tantos, solo con que un 2% acabe en planta y uno de cada 1.000 en UCI, se acabará produciendo. Y será muy duro».
Codita pide máxima cautela a la población y seguir aplicando las medidas de seguridad por estar en esta quinta oleada, al tiempo en que reclama recursos con urgencia. «Algunos equipos de costa no podrán cubrir los refuerzos habituales de este verano porque no hay profesionales en el mercado. Es una cuestión de falta de manos», zanja Gerard Mora.
