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    La carga de coches eléctricos en puntos públicos de Tarragona se triplica

    En los cuatro primeros meses de este año ya se han usado más que en todo el año 2021. Los conductores reclaman más y más rápidos

    18 junio 2023 08:28 | Actualizado a 18 junio 2023 08:31
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    Xavier Bordallo está cargando su coche eléctrico en el punto de recarga que está frente a la antigua Facultat de Lletres. Reconoce que, pese a que vive en Tarragona, es la primera vez que lo utiliza. La escena, hasta no hace mucho, apenas se veía, y los sitios reservados para cargar eran usados como plazas de aparcamiento.

    Este conductor normalmente carga el coche en el trabajo, en Vilanova i la Geltrú, y también tiene un punto en casa. Tiene el coche desde diciembre del año pasado y reconoce que sin estos dos puntos de carga garantizados no se habría planteado comprarlo. «Si no, no me habría atrevido», dice, porque la cantidad de cargadores en la ciudad es del todo insuficiente.

    Los cargadores que existen, eso sí, cada vez tienen más demanda. En el caso de los puntos públicos que gestiona la Empresa Municipal de Transports Públics de Tarragona, los datos son elocuentes. En los seis que hay ubicados en la Plaça Imperial Tarraco, l’Arrabassada. l’Anella Mediterránea (hay dos), Les Gavarres y la Tabacalera se registraron el año pasado 6.646 cargas; prácticamente el triple que en el año 2021, cuando hubo 2.384.

    No hay colas

    El director de la empresa municipal, Sergio Arts, explica que han constatado que la demanda aumenta mes a mes. Solo en los cuatro primeros meses de este año, de enero a abril, ya ha habido más cargas (2.834), que en todo el año 2021.

    Los que más cargas registran son los dos únicos rápidos: el de la Imperial Tarraco y el de l’Arrabassada. De hecho, 7 de cada 10 cargas de los puntos públicos el año pasado fueron allí. Eso sí, hay que aclarar que son públicos pero no gratuitos; la tarifa es de 0,10 cent/min. En este tipo de puntos se puede cargar para 120 kilómetros de autonomía en menos de 30 minutos.

    Con todo, asegura Arts, no han detectado que los puntos que existen no puedan asumir la demanda, «no vemos colas; no es habitual que la gente quiera cargar y tenga que esperar», asegura.

    Los usuarios, no obstante, tienen sus objeciones. Víctor Hernández, subdelegado en Tarragona de la Asociación de usuarios de Vehículos Eléctricos y propietario de un coche de estas características, señala que la red de la ciudad es tan escasa que quienes están pensando en cambiarse a este tipo de movilidad se lo piensan dos veces.

    Según la plataforma Electromaps, una de las más usadas para ubicar dónde están los puntos de recarga y su estado, actualmente hay en el municipio 42 puntos. En septiembre del año pasado, cuando realizamos la consulta, había 35.

    La mayoría de los cargadores según la plataforma están en el centro, donde hay 16. Conforme aumenta la distancia del centro hay menos. En el barrio de Sant Salvador, por ejemplo, no hay ninguno.

    Plazas en los aparcamientos

    Con todo, advierte, en la ciudad todavía no se cumple con el real decreto del Gobierno 29/2021 que entró en vigor en enero de este año y que obliga a tener un cargador por cada cuarenta plazas de aparcamiento, independientemente de si se trata de instalaciones públicas o privadas.

    Arts reconoce que en el caso de los aparcamientos públicos de la ciudad no se cumple con la norma pese a que en algunos aparcamientos ya había puntos de carga antes de que entrara en vigor.

    Admite que al tratarse de contratos públicos la instalación de los puntos de carga debe licitarse y no se trata de un proceso «ni ágil ni rápido». Explica sin embargo que ya se está cerrando el informe para poder iniciar el concurso público. Reconoce, no obstante, que no se trata solo de poner el número de cargadores a que obliga la norma, sino de que tengan la potencia suficiente, algo que están estudiando porque en algunos aparcamientos no se puede poner más potencia debido a las características de la red.

    Esa es una de las principales reivindicaciones de Hernández, quien dice que en teoría hay cargadores pero en la práctica apenas son funcionales. «No puedes aparcar por ejemplo en el Saavedra y esperar entre 8 y 9 horas a cargar y además pagando párking, eso nadie se lo puede permitir», ejemplifica.

    Por otra parte, el Ministerio de Transición Ecológica está preparando su propio mapa de dónde se encontrarán los puntos públicos de recarga de coches eléctricos, con información sobre horarios, precios y métodos de pago. En mayo dio tres meses a los operadores para enviar la información. En el caso de la empresa municipal ya ha remitido la información.

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