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El Servei Català de Trànsit ha hecho balance de la siniestralidad en las carreteras de Catalunya en estos primeros cuatro meses de 2023. En el conjunto de la comunidad autónoma se han registrado oficialmente 51 fallecimientos en 42 accidentes mortales, lo que significa una reducción de 12,5% de accidentes mortales y un 7,2% menos de personas que han perdido la vida en las carreteras del país.
Durante este mes, Trànsit ha registrado 17 víctimas mortales, el mismo número que en abril de 2019, y 6 menos que el mismo periodo de 2022 a nivel catalán, un mes que fue especialmente trágico a las carreteras catalanas, con 23 fallecidos.
En Tarragona, el número de víctimas ha sido de seis. Empezó el mes trágico en Batea (Terra Alta) el día 5 con un conductor que fallecía en una colisión frontal con un camión en plena Semana Santa. Y cuatro días más tarde, un adolescente de 17 años perdía la vida en Tarragona en un roce con un turismo. El tercer fallecido también fue un motorista en un accidente de tráfico en la N-340 pocos días después.
De las 16 víctimas de este año, hay tres peatones, tres motoristas, un ciclista y el resto conductores o pasajeros de coches
Las últimas tres víctimas de abril en las carreteras de Tarragona han sido esta semana: dos peatones en Rodonyà el día 26 y la última de este mes en la demarcación se registró este fin de semana en Cornudella del Montsant. Un ciclista murió a consecuencia de un atropello por parte de un hombre sin carnet que lo arrolló.
A los 51 decesos oficiales, hay que sumar un peatón fallecido en El Vendrell el pasado mes de febrero. La víctima entró grave en el hospital y murió poco después de las 24 horas que contempla el Servei Català de Trànsit para considerarlas víctimas mortales por accidente de tráfico. Por ello, el numero de víctimas mortales en las carreteras tarraconenses este cuatrimestre es 16 y no 15 según las estadísticas oficiales.
Al margen de los decesos en la provincia, una de las víctimas mortales de este cuatrimestre en Catalunya es un motorista de Tarragona que falleció en un accidente de tráfico fuera de la demarcación, concretamente en Sant Pere de Ribes (Garraf) el pasado mes de enero.
Decesos por demarcación
Por provincias, en la red viaria interurbana de Barcelona ha habido 21 víctimas mortales, 16 en Tarragona, 11 en Lleida y 4 a Girona. En estos cuatro primeros meses de 2023, se mantiene la tendencia a la baja en las carreteras gerundenses, dado que se ha pasado de 12 muertos en 2022 a 4 este año. También hay un descenso respeto el año pasado a las carreteras de la demarcación de Barcelona, donde se ha pasado de 24 muertos a 21, mientras que en Tarragona hay dos víctimas mortales más que el año pasado. E incrementa de forma preocupante el número de víctimas mortales a las carreteras de Lleida, puesto que han pasado de 5 en 2022 a 11 este año.
En estos cuatro meses de 2023, la siniestralidad mortal se caracteriza por la dispersión en cuanto a carreteras. Cuatro vías han registrado tres víctimas mortales cada una: la N-340, la C-37, la C-53 y la TV-3022. Hay que recordar que dos siniestros provocaron tres muertos cada uno: uno en la TV-3022 en El Perelló (Baix Ebre) y el otro a la C-53 en la Fuliola (Urgell). A la vez, conviene destacar también la reducción de la siniestralidad que está experimentando la AP-7 en este periodo respeto el año pasado, con 3 víctimas mortales este año ante las 10 del 2022.
