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La pandemia supuso un punto de inflexión para la histórica discoteca Pacha La Pineda. En 2021, el local confirmó su cierre definitivo, aun teniendo concesión hasta 2022. La empresa Ocio a Tope tomó esta decisión por la difícil inversión que suponía reabrir el local.
En 2023 se comenzó el desmantelamiento del inmueble por parte de los anteriores propietarios, el cual suponía el local de ocio más grande de toda la Costa Daurada. Paralelamente, el Ayuntamiento de Vila-seca tiene en marcha un plan para eliminar los elementos exteriores de la discoteca para evitar peligros.
En estos cuatro años, el estado interior del edificio era un misterio, pero las imágenes captadas por Marc Raja, conocido en redes como @achichareishonurbex han arrojado luz sobre la realidad de este histórico local.
El usuario, residente en Barcelona, se dedica a retratar lugares abandonados de todo el Estado en sus redes sociales, difundiendo las imágenes en TikTok, Instagram y YouTube. Recientemente, pudo entrar en la antigua Pacha La Pineda para comprobar su estado.
La exclusividad de este material, junto a lo impactante de las imágenes, ha conseguido que el vídeo supere las 300.000 visualizaciones en Tiktok. Raja reconoce que es uno de los vídeos que más éxito ha tenido de su cuenta.
Entrevistado por este Diari, el usuario reconoce que tenía «diversos compañeros detrás de este material que no habían conseguido entrar», aunque explica que su interior estaba «saqueado y vandalizado», cuestión por la que cree que no fue el primero en acceder.
Aun así, Raja reconoce que «no tuvo mucha resistencia para acceder», ya que las puertas estaban abiertas y entraron andando «sin problemas».
El ayuntamiento de Vila-seca tenía en marcha un plan para tapiar por completo el inmueble, pero el reportero consiguió adelantarse. Ahora, el usuario asegura que el acceso ha vuelto a cerrarse de nuevo.
Las imágenes publicadas cedidas al Diari parecen sacadas de una película apocalíptica, con vegetación muerta y otras «malas hierbas» emergiendo del suelo. Es sobrecogedor ver como un lugar que albergaba tanta vida se ha degradado en apenas cuatro años.
En este tiempo, Pacha La Pineda ha pasado de ser una de las referencias en ocio nocturno de toda Catalunya (y de las regiones cercanas) a convertirse en el escenario perfecto para una obra de terror con ambientación costera.
Pacha La Pineda se inauguró en 1991 y no pudo llegar, por poco, a su trigésimo aniversario. Por el momento, se desconoce el futuro de este mítico local, aunque el ayuntamiento de Vila-seca ha dejado claro que quiere desvincular el ocio nocturno de este lugar.
El ayuntamiento tiene en mente abrir un concurso de ideas internacional que defina los usos de este equipamiento y el de Aquopolis, los cuales suman 14 hectáreas en su conjunto.
