Liberto Beltrán, ¿sueño imposible?

El Nàstic tiene muy definidas las posiciones que debe reforzar desde el final de la temporada. El consenso entre cuerpo técnico y secretaria técnica ha sido casi absoluto. Uno de los puestos en los que rápidamente hubo quórum fue en la banda. Allí el conjunto grana busca un extremo desequilibrante que añada competencia sobre todo en el carril izquierdo, aunque la intención es que el jugador que llegue pueda jugar en ambas bandas.

Uno de los nombres que más ha gustado durante toda la temporada es el de Liberto Beltrán. Un jugador que encandila a la secretaria técnica y a Toni Seligrat porque cumple con varios de los atributos que se buscan este año a la hora de encarar la llegada de nuevos futbolistas. Se tiene claro que esta temporada no se puede errar tanto como en el pasado mercado de verano, puesto que se está ante el curso más importante de los últimos años y que marcará el destino inmediato de la entidad tarraconense. En todo caso, se es consciente de que la llegada del jugador de banda no será sencilla, puesto que la competencia que hay por hacerse con sus servicios es voraz.

Beltrán es un futbolista propiedad del Real Betis Balompié, pero que la pasada temporada actuó como cedido en el Lleida Esportiu. Allí el extremo de Castellón de la Plana completó una magnifica temporada, en la que se convirtió en uno de los jugadores más desequilibrantes del grupo III de Segunda División B. De hecho, el Nàstic tuvo que sufrir en sus propias carnes el dinamismo y la calidad de un jugador que ha sorprendido a la categoría de bronce.

Con el conjunto de la Terra Ferma ha disputado 23 partidos en los que ha conseguido dos goles y tres asistencias. Buenos números que le convirtieron en una pieza clave en los esquemas de Molo. Otro de sus grandes puntos fuertes es que solo cuenta con 23 años, por lo que su proyección está fuera de dudas. Su llegada sería un movimiento de presente y de futuro.

Otro de los grandes puntos a su favor es que su adaptación al grupo III es absoluta. De hecho, pese a su corta edad ya ha militado tres temporadas en este grupo de la categoría de bronce, acumulando 56 partidos entre Lleida, Elche y Alcoyano. Además, también tiene experiencia en otro grupo de Segunda División B, ya que hace dos temporadas militó en la Cultural Leonesa.

Muchos equipos tras él

Su llegada se antoja muy complicada, aunque desde el Nàstic se está atento. Liberto es un jugador que ha llamado la atención de varios equipos de Segunda División. Málaga, Tenerife y Fuenlabrada son alguno de los conjuntos de la plata con los que se ha relacionado al extremo de Castellón. Una dura competencia que hace ser realista a un Nàstic que tampoco quiere perder todas las esperanzas. La entidad tarraconense espera que si el futbolista decide continuar un año más en el bronce lo haga en el Nou Estadi.

Por el momento, el Nàstic cuenta con unas bandas con pleno ADN Grana. Roger Brugué, Pol Ballesteros, Bernat Guiu y Pol Prats son los cuatro extremos con los que cuenta Toni Seligrat. Todos con pasado en la cantera del Nàstic y cuentan con mucha proyección en sus botas. También está Ferran Giner, pero el jugador no cuenta para el técnico valenciano y la entidad tarraconense desea que selle su salida cuanto antes.

Otro jugador que está previsto que refuerce los costados es Fran Carbia, el jugador tarraconense terminó su cesión con el Nàstic el pasado 30 de junio, pero desde el club grana se espera llegar a un acuerdo con el Ibiza en las próximas semanas para así poder añadir una pieza más al frente ofensivo grana.