El vestíbulo del Centre de Lectura hierve de gente. Son las 12 del mediodía en Reus y esa zona del centro es una mezcla de olor a piedra mojada, de calles recién aseadas y de sonrisas optimistas. En sábado, Reus celebra el respiro laboral y sus gentes se tiran a la calle para consumir cafeína a primera hora de la mañana o el típico vermú cuando la comida asoma la cabeza. La estampa ya se ha convertido en un clásico, aunque para el Centre de Lectura no resulta un sábado cualquiera.
Profesores y alumnos de la Escola d’Hosteleria de Cambrils han aposentado sus stands para exhibir esa destreza culinaria que les caracteriza. A pocos metros de esa zona, en la Plaça de Sant Pere, las alumnas de la Escola de Dansa del mismo Centre exhiben su mejor repertorio de coreografías ante los flashes incesantes de los celulares. La jornada que han preparado las dos instituciones se ha convertido en un reclamo ideal. Cultura y gastronomía a partes iguales.
Órbita Gastronómica es un proyecto vinculado a los Premios Órbita de Danza Contemporánea, que desde hace dos años convoca a la Escola de Dansa del Centre de Lectura. Con la vinculación con el sector de la gastronomía, se quiere impulsar, al mismo tiempo, la cultura y promoción del producto de proximidad. Por esta razón, la iniciativa cuenta con la colaboración del Institut Escola d’Hosteleria i Turisme, el Mercat de Reus, la DOP Siurana, la DOP Avellana de Reus, el IGP Calçot de Valls, Forn Sistaré y la DOC Priorat.
«Lo que proponemos a nivel de degustación es un fuet de aceite de oliva y vermú Miró», refleja Maria Reyes, docente de la Escola d’Hostelería cambrilense. Además, los asistentes degustan unas chips al punto de sal y tres tipos de bikinis; el Estel, en honor a la misma Escola, con sobrasada y miel, el Roseta Mauri, con queso azul, y el bikini Bartrina, con un pesto de Avellana de Reus.
Los asistentes se agolpan para adoptar posiciones privilegiadas y no demorar mucho la espera. A veces, parece que no hay un mañana. Los expertos trabajan también con un caramelo de tiras, cuanto menos, original. En algún caso despiertan la admiración de los curiosos, con las bocas llenas.
En un rincón, Xavi, del Forn Sistaré, dedica tiempo a la actividad con su pan marca de la casa. Él, como siempre, en manga y pantalones cortos. Su verano dura los 365 días del año. El rostro de Xavi se ha hecho tan familiar que los ganxets le consideran patrimonio de la ciudad. Está en todas las ferias.
Montserrat Fuster, coordinadora pedagógica del centro gastronómico de Cambrils, refleja la esencia de esta actividad. «Yo fui alumna de danza en el Centre de Lectura y Teresa Aguadé me contactó para hacer una actividad conjunta a través de los Premis Òrbita». Montserrat, además, ejerce como profesora de los servicios de restauración de la Escola d’Hosteleria.
Danza contemporánea
Si la gastronomía de luxe alimentaba el apetito, la Plaça Sant Pere luce con escenario y espectáculo. El goteo de gente genera cierto embudo en los accesos y Teresa Aguadé, la directora de la Escola de Dansa del Centre de Lectura, micrófono en mano, se postula como maestra de ceremonias. De hecho presenta a todas las bailarinas, entre número y número, y controla toda la logística del sonido al detalle.
«Intentamos que la danza contemporánea sea más abierta y lo que hacemos es integrarla en distintos campos, uno de ellos, por ejemplo, el de la gente mayor activa y, ahora, con la gastronomía», explica a pie de plaza, entre número y número. El calor se hace notar, pero eso no preocupa demasiado.
No se trata de la primera vez que Centre de Lectura y Escola d’Hosteleria de Cambrils unen esfuerzos para visibilizar sus respectivas obras. En Navidad ya compartieron espacio, aunque en esa ocasión, en el centro cambrilense.
La Escola de Dansa del Centre de Lectura no sólo se ha erigido como una referencia cultural en la ciudad, a nivel de Catalunya disfruta de un prestigio extraordinario, ya que ha formado y ha impulsado a excelentes profesionales que en la actualidad hacen carrera por todo el estado.
El centro apuesta por la calidad de la enseñanza, a través de los planes de estudios de danza clásica, danza española y contemporánea, plan de estudios moderno (jazz, funky) y estudios elementales. Lidera los estudios en danza para preparar bailarines profesionales. Prepara futuros bailarines y bailarinas para el nivel elemental de danza en diferentes materias, también para pruebas en el Institut del Teatre de Barcelona.
El registro contemporáneo, en este caso, inunda el escenario de la Plaça Sant Pere de coreografías maravillosas y complejas, expuestas en diferentes grupos, cada uno ilustrado en vestidos de características diversas. Nadie queda indiferente. Quizás esa es la mayor virtud de cualquier iniciativa. Órbitra Gastronómica la tiene.
